/ miércoles 20 de mayo de 2020

Propuestas para reactivar la economía de Chihuahua

Analistas consultados sostienen que, en el peor de los escenarios, al menos 163 mil chihuahuenses perderán su empleo en el segundo trimestre del año como consecuencia de la parálisis económica tras el paso del Covid-19 por el estado, con todo y la llamada “vuelta a la normalidad” anunciada a partir del mes entrante.

Este indicador muestra sólo una parte de los devastadores efectos de las medidas de confinamiento en la etapa crítica de contagios y fallecimientos por coronavirus.

La economía mexicana será una de las más afectadas en el continente y ello se agrava porque el gobierno del presidente López Obrador no ha querido coordinar esfuerzos con los empresarios y se limita a desplegar programas estrictamente asistencialistas.

El principal problema de la política de aislamiento es la falta de interacción con las entidades federativas, al aplicar una política 100% centralista, pues no es igual el grado de avance o presencia del Covid en las diferentes entidades.

Por otra parte, la administración del gobernador Javier Corral intenta paliar la crisis con una reorientación del presupuesto por 3 mil 400 millones de pesos, insuficientes en el contexto de la parálisis que se vive en Chihuahua por un desastroso manejo de las finanzas públicas desde que inició su gestión.

Ahora bien, no dejemos de lado que durante el primer trimestre del año la economía en el país mostró una caída del 2.4% en comparación con el mismo periodo de 2019.

Presenté en el Congreso diversas iniciativas para la reactivación económica de Chihuahua en todas sus ramas, pues es impostergable la creación de un Consejo rector en el que intervengan el Gobierno Estatal, cámaras empresariales y académicos, cuya misión será el puntual seguimiento a la emergencia sanitaria, su impacto económico y con base en esto, generar un plan para optimizar los recursos de la entidad y explotar las áreas de oportunidad del mercado y la reactivación norteamericana.


Otras propuestas son:

1. La implementación de un Certificado Covid, que de manera consensuada delimite las reglas de operación y funcionamiento de las empresas para dar certidumbre sobre la suficiencia sanitaria.

2. Focalización de las cadenas productivas y generadoras de insumo locales, como una medida para satisfacer la exigencia de las empresas exportadoras de la entidad ante el próximo crecimiento de la demanda externa.

3. Inmediata reglamentación para la apertura del sector restaurantero, hoteles y centros de esparcimiento, previa certificación Covid.

4. Fortalecimiento del sector primario estatal mediante la aplicación de un subsidio al IEPS estatal a gasolinas y diésel, durante el periodo 2020-2021.

5. La creación de un Programa de incentivo al autoempleo, focalizado en los grupos vulnerables y correlacionados con la demanda empresarial local.

6. Implementación de la Bolsa de Empleo en línea con el compromiso de que los empleos generados mediante este instrumento, quedarán exentos del pago de Impuesto Sobre la Nómina durante el plan 2020-2021.

7. Para estimular a la juventud, eliminación de cuotas de inscripción en los niveles medio y superior durante el periodo de aplicación del plan de reactivación económica 2020-2021.


La más reciente iniciativa a mediano plazo pretende reformar el artículo 93 de la Constitución de Chihuahua para dar pie a la instalación del Consejo Estatal de Emergencia Económica, una vez que el Ejecutivo determine la existencia de hechos o acontecimientos presentes o futuros inminentes de fuerza mayor que por su naturaleza pongan en riesgo la actividad económica y laboral en el estado.


*Omar Bazán Flores. Licenciado en Derecho, diputado local y presidente del Comité Directivo Estatal del PRI a partir de julio de 2017.


Empresario, dos veces diputado federal, dirigente juvenil, así como de la CNOP y Fundación Colosio en el estado de Chihuahua.





Analistas consultados sostienen que, en el peor de los escenarios, al menos 163 mil chihuahuenses perderán su empleo en el segundo trimestre del año como consecuencia de la parálisis económica tras el paso del Covid-19 por el estado, con todo y la llamada “vuelta a la normalidad” anunciada a partir del mes entrante.

Este indicador muestra sólo una parte de los devastadores efectos de las medidas de confinamiento en la etapa crítica de contagios y fallecimientos por coronavirus.

La economía mexicana será una de las más afectadas en el continente y ello se agrava porque el gobierno del presidente López Obrador no ha querido coordinar esfuerzos con los empresarios y se limita a desplegar programas estrictamente asistencialistas.

El principal problema de la política de aislamiento es la falta de interacción con las entidades federativas, al aplicar una política 100% centralista, pues no es igual el grado de avance o presencia del Covid en las diferentes entidades.

Por otra parte, la administración del gobernador Javier Corral intenta paliar la crisis con una reorientación del presupuesto por 3 mil 400 millones de pesos, insuficientes en el contexto de la parálisis que se vive en Chihuahua por un desastroso manejo de las finanzas públicas desde que inició su gestión.

Ahora bien, no dejemos de lado que durante el primer trimestre del año la economía en el país mostró una caída del 2.4% en comparación con el mismo periodo de 2019.

Presenté en el Congreso diversas iniciativas para la reactivación económica de Chihuahua en todas sus ramas, pues es impostergable la creación de un Consejo rector en el que intervengan el Gobierno Estatal, cámaras empresariales y académicos, cuya misión será el puntual seguimiento a la emergencia sanitaria, su impacto económico y con base en esto, generar un plan para optimizar los recursos de la entidad y explotar las áreas de oportunidad del mercado y la reactivación norteamericana.


Otras propuestas son:

1. La implementación de un Certificado Covid, que de manera consensuada delimite las reglas de operación y funcionamiento de las empresas para dar certidumbre sobre la suficiencia sanitaria.

2. Focalización de las cadenas productivas y generadoras de insumo locales, como una medida para satisfacer la exigencia de las empresas exportadoras de la entidad ante el próximo crecimiento de la demanda externa.

3. Inmediata reglamentación para la apertura del sector restaurantero, hoteles y centros de esparcimiento, previa certificación Covid.

4. Fortalecimiento del sector primario estatal mediante la aplicación de un subsidio al IEPS estatal a gasolinas y diésel, durante el periodo 2020-2021.

5. La creación de un Programa de incentivo al autoempleo, focalizado en los grupos vulnerables y correlacionados con la demanda empresarial local.

6. Implementación de la Bolsa de Empleo en línea con el compromiso de que los empleos generados mediante este instrumento, quedarán exentos del pago de Impuesto Sobre la Nómina durante el plan 2020-2021.

7. Para estimular a la juventud, eliminación de cuotas de inscripción en los niveles medio y superior durante el periodo de aplicación del plan de reactivación económica 2020-2021.


La más reciente iniciativa a mediano plazo pretende reformar el artículo 93 de la Constitución de Chihuahua para dar pie a la instalación del Consejo Estatal de Emergencia Económica, una vez que el Ejecutivo determine la existencia de hechos o acontecimientos presentes o futuros inminentes de fuerza mayor que por su naturaleza pongan en riesgo la actividad económica y laboral en el estado.


*Omar Bazán Flores. Licenciado en Derecho, diputado local y presidente del Comité Directivo Estatal del PRI a partir de julio de 2017.


Empresario, dos veces diputado federal, dirigente juvenil, así como de la CNOP y Fundación Colosio en el estado de Chihuahua.