De libros
“Donde se quiere a los libros, se quiere a los hombres”
- Heinrich Heine -
Hace unos días tuve el privilegio de acompañar a la maestra Lidia Holguín, el ingeniero Carlos González (presidente de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua) y al escritor Elko Omar Vázquez (autor de “Historias de humo y viento”) como presentadores del libro “Romance de los cerros y la leyenda del Grande”, del periodista Sergio Armando López Castillo, libro que ya platiqué sobre él en este espacio y que de verdad recomiendo leer. En la presentación se encontraba mi amigo Víctor Medina, quien es columnista del presente rotativo y me comentó que parte del interés de haber acudido era porque en unos días él iba a presentar el libro “Herencia de amor”, de Édgar Fernando Gaytán, a quienes muchos recordarán como locutor del programa “La hora azul”, de Radiorama; en su libro, Édgar nos muestra la importancia de la interacción entre abuelos y nietos, recordándonos que no es lo mismo ser abuelo a ser adulto mayor (hay abuelos a los 40 años) y en el que nos orienta a elaborar adecuadamente un árbol genealógico; lectura por demás interesante.
Mi compañera Silvia González (también columnista de El Heraldo de Chihuahua) tenía toda la intención de acudir a la presentación, pero fue invitada a participar en la Feria del Libro en Guadalajara y pues era de entenderse que prefiriera acudir a escuchar a escritores de tan fino y educado léxico como lo es Paco Taibo II y a plumas colegas de José Saramago que desde Portugal trajeron su cultura a través de las letras.
Aquí en Chihuahua tenemos excelentes libros escritos por chihuahuenses y que de verdad enriquecen al intelecto; la “Óptica de un ciudadano”, de Toño Ríos; “La seducción de las musas”, de Ernesto Visconti; los poemas de Norma Gutiérrez en “Amor de mis amores”; “El debate”, de Roberto Piñón; la “Historia de la nación mexicana I y II”, de Sergio Armendáriz Royval; los “Avatares y retos globales de una nueva era”, de Eduardo Fernández; los “Tres cuentos historiados”, de Humberto Murillo, y “Mediocracia, los medios que mecen la cuna”, de nuestro director, Javier Contreras, son libros que realmente ponen en alto la tinta del estado.
Leer es el mejor ejercicio para nuestra mente, a través de la lectura viajamos y experimentamos un sinnúmero de aventuras. La interpretación de un libro puede ser diferente para cada lector; leamos por gusto, por obligación o para quitarnos el aburrimiento, no importa el motivo. ¿Qué les parece si para esta Navidad regalamos un libro? ¿juega?, recuerden que aquel que no lee no lleva ninguna ventaja sobre el que no sabe leer. Venga pues.
