/ viernes 28 de mayo de 2021

Reflexionando la política

Me parece que Maru había acertado al decir: “Esta elección va a ser extraordinaria”. Los hechos le están dando la razón. Es una elección extraordinaria. No se esperaba que sucediera lo que está sucediendo.

Votar es una obligación; no es algo si quieres, es tu deber. Vota. Y vota con responsabilidad. No te inclines a votar por la candidata o por el candidato que te va a dar trabajo como funcionario.

Vota por el candidato, por la candidata que busca la mejor política, por quien da protección a la vida humana, a la familia, a la libertad de de religión. Busca que tu candidata(o) sustente una política verdadera. No que busque ganar dinero ejerciendo la política. Esos políticos son ladrones. Que busque siempre el bien común; que participa en una política y en la economía para apoyar a los excluidos. Escoge una candidata(o) que trabaje para todos los ciudadanos. Selecciona una(o) candidata(o) que tenga vergüenza y humildad para su puesto.

El papa Francisco tiene un arte especial: redactar una sentencia con mucho fondo, que obliga a pensar. Voy a reproducir unas oraciones gramaticales que obligan a los políticos y a los simples ciudadanos. Ojalá y te ayuden a meditar sobre la política:

“La política no es el mero arte de administrar el poder, es una vocación de servicio para la generación del bien común. – La política es la forma más alta y más grande de la caridad. – El amor político es social para todos. – Cuando falta la universidad del amor, la política cae, se enferma, o se hace mala. – Cuando me preguntan: “¿Cómo está la política del mundo?”, les digo: Miren donde hay guerras, ahí existe la derrota de la política. – Una política que no es capaz de dialogar para evitar un conflicto es una política derrotada, terminada. – Siempre hay que tener en cuenta que la unidad es superior al conflicto. Hay que buscar la unidad. – La política no es la llegada, es el camino, es iniciar procesos. – La desconfianza en la política viene porque se confunde con una empresa, donde se ve qué cosa me sirve o cuánto me da. – La política es caminar, es ver, sobre todo si en el camino se quema el político. Lo importante es llegar a una unidad, porque unidad es superior al conflicto. – Ser católico comprometido en la política no significa ser un recluta de algún grupo, organización o partido, sino vivir dentro de la amistad, dentro de una comunidad. – El Evangelio no hace libres. – La esperanza latinoamericana tiene rostro femenino. – La encíclica “Fratelli Tutti” es una llamarada a construir una civilización sin odio. – El buen samaritano va a ayudar al hombre herido, y no le pregunta por quién vota o qué ideas tiene. – El amor en la política significa: oración, fe y salir a amar al prójimo. – La buena política promueve la participación de los jóvenes. – La paz se basa en el respeto de cada persona. – Ayudar a los pobres no es comunismo. – La política no está reservada sólo a los gobernantes, todos somos responsables del bien. – La política es sanamente laica, donde la religión y la política no se mezclan. – Los católicos deben intervenir en la política”.

Me parece que Maru había acertado al decir: “Esta elección va a ser extraordinaria”. Los hechos le están dando la razón. Es una elección extraordinaria. No se esperaba que sucediera lo que está sucediendo.

Votar es una obligación; no es algo si quieres, es tu deber. Vota. Y vota con responsabilidad. No te inclines a votar por la candidata o por el candidato que te va a dar trabajo como funcionario.

Vota por el candidato, por la candidata que busca la mejor política, por quien da protección a la vida humana, a la familia, a la libertad de de religión. Busca que tu candidata(o) sustente una política verdadera. No que busque ganar dinero ejerciendo la política. Esos políticos son ladrones. Que busque siempre el bien común; que participa en una política y en la economía para apoyar a los excluidos. Escoge una candidata(o) que trabaje para todos los ciudadanos. Selecciona una(o) candidata(o) que tenga vergüenza y humildad para su puesto.

El papa Francisco tiene un arte especial: redactar una sentencia con mucho fondo, que obliga a pensar. Voy a reproducir unas oraciones gramaticales que obligan a los políticos y a los simples ciudadanos. Ojalá y te ayuden a meditar sobre la política:

“La política no es el mero arte de administrar el poder, es una vocación de servicio para la generación del bien común. – La política es la forma más alta y más grande de la caridad. – El amor político es social para todos. – Cuando falta la universidad del amor, la política cae, se enferma, o se hace mala. – Cuando me preguntan: “¿Cómo está la política del mundo?”, les digo: Miren donde hay guerras, ahí existe la derrota de la política. – Una política que no es capaz de dialogar para evitar un conflicto es una política derrotada, terminada. – Siempre hay que tener en cuenta que la unidad es superior al conflicto. Hay que buscar la unidad. – La política no es la llegada, es el camino, es iniciar procesos. – La desconfianza en la política viene porque se confunde con una empresa, donde se ve qué cosa me sirve o cuánto me da. – La política es caminar, es ver, sobre todo si en el camino se quema el político. Lo importante es llegar a una unidad, porque unidad es superior al conflicto. – Ser católico comprometido en la política no significa ser un recluta de algún grupo, organización o partido, sino vivir dentro de la amistad, dentro de una comunidad. – El Evangelio no hace libres. – La esperanza latinoamericana tiene rostro femenino. – La encíclica “Fratelli Tutti” es una llamarada a construir una civilización sin odio. – El buen samaritano va a ayudar al hombre herido, y no le pregunta por quién vota o qué ideas tiene. – El amor en la política significa: oración, fe y salir a amar al prójimo. – La buena política promueve la participación de los jóvenes. – La paz se basa en el respeto de cada persona. – Ayudar a los pobres no es comunismo. – La política no está reservada sólo a los gobernantes, todos somos responsables del bien. – La política es sanamente laica, donde la religión y la política no se mezclan. – Los católicos deben intervenir en la política”.