/ martes 12 de octubre de 2021

Reforma a la Reforma Eléctrica

Dale a administrar la arena del desierto del Sahara al gobierno, cualquiera que éste sea, y tendremos escasez de arena en poco tiempo. Esta frase tiene mucho de verdad, ya que normalmente las empresas de gobierno terminan siendo ineficientes y recibiendo subsidios para poder subsistir y esto es en contra de todos nosotros los mexicanos.

Comisión Federal de Electricidad, CFE y Pemex son las dos empresas más grandes del gobierno federal, con presupuestos de miles de millones y con miles de millones de pérdidas, año tras año. Querer que cambie esto es creer que la luna es de queso.

CFE es una empresa del Estado que produce energía eléctrica, como cualquier otra. Ahora se pretende que también se convierta en reguladora, es decir en juez y parte, desapareciendo todos los organismos reguladores, que han funcionado bien y que pueden mejorar, porque nos ha costado mucho echarlos a andar. La propuesta puede desaparecer a las empresas privadas generadoras de energía, que producen energía limpia, bien sea solar o eólica, conservando nuestro medio ambiente, que ya estamos viendo los cambios climáticos tan graves que estamos teniendo, pudiendo llegar a cancelar la producción de energía residencial o de empresas privadas, que son millones de casas y empresas que generan su propia energía., cuyos contratos de entregar su energía producida a la CFE pueden ser cancelados de la noche a la mañana, lo cual es ilegal, ya que ninguna ley puede ser aplicada de manera retroactiva y esos permisos no pueden ser cancelados por motivo de la nueva ley.

La CFE, de acuerdo con la reforma planteada por el inquilino de Palacio Nacional, deberá producir el 54% de la demanda de energía nacional, siendo que ahora produce el 46%. ¿Cómo le va a hacer para producir más de la mitad de la energía eléctrica? Seguramente echando a andar sus plantas obsoletas, con energía altamente contaminante, como el combustóleo, que es el desecho de la refinería o con el carbón, que también es altamente contaminante, lo que nos va a encarecer y perjudicar nuestro medio ambiente. Probablemente tendremos apagones más seguido y poco interés en producir la energía eléctrica por los privados.

¿Se acuerdan del presidente que nos dijo (López Portillo) que deberíamos aprender a administrar la riqueza, ya que se habían descubierto enormes yacimientos de petróleo en el Golfo? Como el gobierno estaba administrando toda la producción de petróleo, ¿qué se hizo para administrar la riqueza? ¡Nada! Se hicieron millonarios los altos directivos de Pemex, como Lozoya, que, en lugar de estar en la cárcel, anda libre tranquilamente. Fue un gran botín de los gobernantes y ahora el petróleo cada vez producimos menos y lo exportamos crudo, sin un agregado de refinación, ya que no se pusieron más refinerías y las de aquella época se hicieron obsoletas.

Algo increíble es que el Partido Verde, que dice defender el medio ambiente, está dispuesto a votar a favor de la contaminación y la eliminación de la producción de las energías limpias y renovables.

Esperamos que nuestros diputados federales y senadores voten en contra de esta reforma de la reforma energética, por el bien de nosotros los ciudadanos que votamos por ellos.


Dale a administrar la arena del desierto del Sahara al gobierno, cualquiera que éste sea, y tendremos escasez de arena en poco tiempo. Esta frase tiene mucho de verdad, ya que normalmente las empresas de gobierno terminan siendo ineficientes y recibiendo subsidios para poder subsistir y esto es en contra de todos nosotros los mexicanos.

Comisión Federal de Electricidad, CFE y Pemex son las dos empresas más grandes del gobierno federal, con presupuestos de miles de millones y con miles de millones de pérdidas, año tras año. Querer que cambie esto es creer que la luna es de queso.

CFE es una empresa del Estado que produce energía eléctrica, como cualquier otra. Ahora se pretende que también se convierta en reguladora, es decir en juez y parte, desapareciendo todos los organismos reguladores, que han funcionado bien y que pueden mejorar, porque nos ha costado mucho echarlos a andar. La propuesta puede desaparecer a las empresas privadas generadoras de energía, que producen energía limpia, bien sea solar o eólica, conservando nuestro medio ambiente, que ya estamos viendo los cambios climáticos tan graves que estamos teniendo, pudiendo llegar a cancelar la producción de energía residencial o de empresas privadas, que son millones de casas y empresas que generan su propia energía., cuyos contratos de entregar su energía producida a la CFE pueden ser cancelados de la noche a la mañana, lo cual es ilegal, ya que ninguna ley puede ser aplicada de manera retroactiva y esos permisos no pueden ser cancelados por motivo de la nueva ley.

La CFE, de acuerdo con la reforma planteada por el inquilino de Palacio Nacional, deberá producir el 54% de la demanda de energía nacional, siendo que ahora produce el 46%. ¿Cómo le va a hacer para producir más de la mitad de la energía eléctrica? Seguramente echando a andar sus plantas obsoletas, con energía altamente contaminante, como el combustóleo, que es el desecho de la refinería o con el carbón, que también es altamente contaminante, lo que nos va a encarecer y perjudicar nuestro medio ambiente. Probablemente tendremos apagones más seguido y poco interés en producir la energía eléctrica por los privados.

¿Se acuerdan del presidente que nos dijo (López Portillo) que deberíamos aprender a administrar la riqueza, ya que se habían descubierto enormes yacimientos de petróleo en el Golfo? Como el gobierno estaba administrando toda la producción de petróleo, ¿qué se hizo para administrar la riqueza? ¡Nada! Se hicieron millonarios los altos directivos de Pemex, como Lozoya, que, en lugar de estar en la cárcel, anda libre tranquilamente. Fue un gran botín de los gobernantes y ahora el petróleo cada vez producimos menos y lo exportamos crudo, sin un agregado de refinación, ya que no se pusieron más refinerías y las de aquella época se hicieron obsoletas.

Algo increíble es que el Partido Verde, que dice defender el medio ambiente, está dispuesto a votar a favor de la contaminación y la eliminación de la producción de las energías limpias y renovables.

Esperamos que nuestros diputados federales y senadores voten en contra de esta reforma de la reforma energética, por el bien de nosotros los ciudadanos que votamos por ellos.