/ jueves 17 de diciembre de 2020

Retos del Sistema Financiero Mexicano


El Banco de México publicó en días pasados el Reporte de Estabilidad Financiera del segundo semestre de 2020, en donde da cuenta del seguimiento a los riesgos de la estabilidad del sistema financiero del país. De igual manera, BBVA Research publicó sus observaciones al citado reporte.

El sistema financiero ha mostrado resistencia a los embates producidos por la pandemia, manteniendo los niveles de capital adecuados y buenos niveles de liquidez. Lo que podría poner en riesgo es la incertidumbre de los efectos que puedan causar la cartera de los sectores más vulnerables.

El financiamiento a los hogares se contrajo derivado de la reducción de la oferta de crédito al consumo y de créditos a la vivienda. La reducción de créditos al consumo se explica por la disminución del consumo en los hogares producido por las políticas de distanciamiento social y el impacto de la reducción o incertidumbre de ingresos en los hogares. Esto se aprecia en la utilización de las tarjetas de crédito, que observaron una reducción de un 20% en su uso. Recientemente se ha observado un incremento de la demanda de los créditos a la vivienda, especialmente en montos elevados. Por otro lado, los niveles de morosidad en la cartera de Infonavit han tenido un incremento, pasando de 13.9 a 15.4%. El incremento tiene su principal causa en la pérdida de empleo.

En el caso de las empresas, el financiamiento se ha reducido, esto quizás a la disminución en sus niveles de ventas que han ocasionado el retorno de su liquidez y la reducción de necesidades de financiamiento para la adquisición de materia prima o mercancía. Por otro lado, empresas listadas en las bolsas de valores nacionales han reducido su capacidad de servir la deuda por la reducción de sus utilidades de operaciones.

La pandemia también incrementó los riesgos de solvencia y financiero del sector asegurador por el alza en la siniestralidad en los seguros de vida y de gastos mayores. Aún y con este incremento de riesgo, el sector cuenta con las reservas suficientes para enfrentar la pandemia.

El Banco de México llevó a cabo un ejercicio de prueba de estrés al sistema financiero en donde realizan diversas simulaciones sobre la capacidad del sistema para mantener niveles de capital y de liquidez adecuados. Los resultados valoraron positivamente al sistema, pero sí advierten que algunas instituciones no podrán mantener su nivel de capitalización por encima de los mínimos regulatorios.

Adicionalmente se hace un llamado a la banca de desarrollo e instituciones de fomento económico para que tengan una participación proactiva y ayuden a mitigar los efectos crediticios de las contracciones económicas, empleando sus capacidades al apoyo de proyectos socialmente rentables y con condiciones adecuadas de recuperación. La ahora titular de la Secretaría de Economía, Tatiana Clouthier, tendrá una oportunidad de hacer ver sus capacidades ante este reto que le imponen.


El Banco de México publicó en días pasados el Reporte de Estabilidad Financiera del segundo semestre de 2020, en donde da cuenta del seguimiento a los riesgos de la estabilidad del sistema financiero del país. De igual manera, BBVA Research publicó sus observaciones al citado reporte.

El sistema financiero ha mostrado resistencia a los embates producidos por la pandemia, manteniendo los niveles de capital adecuados y buenos niveles de liquidez. Lo que podría poner en riesgo es la incertidumbre de los efectos que puedan causar la cartera de los sectores más vulnerables.

El financiamiento a los hogares se contrajo derivado de la reducción de la oferta de crédito al consumo y de créditos a la vivienda. La reducción de créditos al consumo se explica por la disminución del consumo en los hogares producido por las políticas de distanciamiento social y el impacto de la reducción o incertidumbre de ingresos en los hogares. Esto se aprecia en la utilización de las tarjetas de crédito, que observaron una reducción de un 20% en su uso. Recientemente se ha observado un incremento de la demanda de los créditos a la vivienda, especialmente en montos elevados. Por otro lado, los niveles de morosidad en la cartera de Infonavit han tenido un incremento, pasando de 13.9 a 15.4%. El incremento tiene su principal causa en la pérdida de empleo.

En el caso de las empresas, el financiamiento se ha reducido, esto quizás a la disminución en sus niveles de ventas que han ocasionado el retorno de su liquidez y la reducción de necesidades de financiamiento para la adquisición de materia prima o mercancía. Por otro lado, empresas listadas en las bolsas de valores nacionales han reducido su capacidad de servir la deuda por la reducción de sus utilidades de operaciones.

La pandemia también incrementó los riesgos de solvencia y financiero del sector asegurador por el alza en la siniestralidad en los seguros de vida y de gastos mayores. Aún y con este incremento de riesgo, el sector cuenta con las reservas suficientes para enfrentar la pandemia.

El Banco de México llevó a cabo un ejercicio de prueba de estrés al sistema financiero en donde realizan diversas simulaciones sobre la capacidad del sistema para mantener niveles de capital y de liquidez adecuados. Los resultados valoraron positivamente al sistema, pero sí advierten que algunas instituciones no podrán mantener su nivel de capitalización por encima de los mínimos regulatorios.

Adicionalmente se hace un llamado a la banca de desarrollo e instituciones de fomento económico para que tengan una participación proactiva y ayuden a mitigar los efectos crediticios de las contracciones económicas, empleando sus capacidades al apoyo de proyectos socialmente rentables y con condiciones adecuadas de recuperación. La ahora titular de la Secretaría de Economía, Tatiana Clouthier, tendrá una oportunidad de hacer ver sus capacidades ante este reto que le imponen.