El fracaso de la ideología comunista y el rechazo de lo que tiene de fundamentalmente negativo por dirigentes como Vladímir Putin se refleja en el plan que los continuadores del socialismo tienen para la familia. En la obra “El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado”, de Friedrich Engels, nos damos una idea de lo que se pretende. Para Engels en el “estadio primitivo (de la familia)… imperaba en el seno de la tribu el comercio sexual promiscuo”, que con el tiempo se confirmó que era realmente “el matrimonio de grupos”. En cuanto a los mamíferos dice:
“Encontramos en ellos todas las formas de la vida sexual: la promiscuidad, la unión por grupos, la poligamia, la monogamia; sólo falta la poliandria” que llega con los seres humanos. Cita a Letourneau: “No hay en los mamíferos ningún grado de relación entre el grado de desarrollo intelectual y la forma de la unión sexual”. Y habla de que “la horda y la familia… no son complementos recíprocos, sino fenómenos antagónicos”. El mayor enemigo de la horda es la familia. “La familia animal y la sociedad humana primitiva son cosas incompatibles”, comenta.
En el matrimonio por grupo, donde “grupos enteros de hombres y grupos enteros de mujeres se pertenecen recíprocamente”… “deja muy poco margen para los celos”. Como los celos, Engels incluye al incesto como una idea desarrollada relativamente tarde, donde el comercio sexual se da entre hermanos, padres e hijos. Y Engels cita a Westermarck: “La promiscuidad supone la supresión de las inclinaciones individuales”. Marx y Engels concluyen que “el primer antagonismo de clases… coincide con (el) antagonismo entre el hombre y la mujer en la monogamia”.
Para Marx, no hay duda: “La familia moderna contiene en germen, no sólo la esclavitud, sino la servidumbre”… “Es la primera forma de familia que no se basa en condiciones naturales”. Por lo anterior, ¿qué busca la agenda de una legislatura de la paridad de género? Su objetivo es vaporizar la familia, sin lugar a dudas, como antinatural, por ser el origen de la explotación de los sexos y la prostitución. En esto, Cuba no es un ejemplo a seguir.
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