/ miércoles 4 de septiembre de 2019

Sufragio efectivo no reelección, ¿será?

Ha llamado mi atención que en los oficios de algunas dependencias de gobierno todavía aparece la frase “Sufragio efectivo, no reelección”, frase que ya está superada por nuestra realidad constitucional. Hoy tenemos “Sufragio efectivo, sí reelección consecutiva”.

La frase: “Sufragio efectivo no reelección” fue dictada por Francisco I. Madero en un afán de democratizar al país. Porque el término “reelección” se asocia con los regímenes dictatoriales, autoritarios y antidemocráticos. En 1910 Francisco I. Madero comenzó su campaña electoral para disputarle la presidencia a Porfirio Díaz, quien había permanecido en el poder por más de treinta años, y es aquí donde se acuña esta frase, periodo en el que comienza la Revolución Mexicana.

La soberanía es el máximo poder que tiene el Estado y reside esencial y originalmente en el pueblo y se fortalece con la reelección y con la revocación del mandato, ya que es aquí donde se expresa la decisión del ciudadano.

El 29 de abril de 1933 se promulgó la reforma constitucional que prohibió la reelección inmediata de legisladores, vigente por 80 años. Ese intermedio concluyó en febrero de 2014.

Se ha llegado a pensar que con la reelección es posible que haya profesionalización y experiencia, es una de las formas de la profesionalización legislativa y se legislará con mayor conocimiento. Pero no podemos caer en un optimismo, esto no es una garantía de un buen gobierno.

Hoy, por disposición constitucional, existe la posibilidad de reelegirse los funcionarios públicos electos por voto libre y secreto.

Los senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos y los diputados al Congreso de la Unión hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

Las constituciones de los estados deberán establecer la elección consecutiva para el mismo cargo de presidentes municipales, regidores y síndicos, por un periodo adicional, siempre y cuando el periodo del mandato de los ayuntamientos no sea superior a tres años. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que lo hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

Las constituciones estatales deberán establecer la elección consecutiva de los diputados a las legislaturas de los estados, hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

La reelección favorece porque crea profesionalismo y mayor técnica legislativa.

“Sufragio efectivo, sí reelección consecutiva”.

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!


Ha llamado mi atención que en los oficios de algunas dependencias de gobierno todavía aparece la frase “Sufragio efectivo, no reelección”, frase que ya está superada por nuestra realidad constitucional. Hoy tenemos “Sufragio efectivo, sí reelección consecutiva”.

La frase: “Sufragio efectivo no reelección” fue dictada por Francisco I. Madero en un afán de democratizar al país. Porque el término “reelección” se asocia con los regímenes dictatoriales, autoritarios y antidemocráticos. En 1910 Francisco I. Madero comenzó su campaña electoral para disputarle la presidencia a Porfirio Díaz, quien había permanecido en el poder por más de treinta años, y es aquí donde se acuña esta frase, periodo en el que comienza la Revolución Mexicana.

La soberanía es el máximo poder que tiene el Estado y reside esencial y originalmente en el pueblo y se fortalece con la reelección y con la revocación del mandato, ya que es aquí donde se expresa la decisión del ciudadano.

El 29 de abril de 1933 se promulgó la reforma constitucional que prohibió la reelección inmediata de legisladores, vigente por 80 años. Ese intermedio concluyó en febrero de 2014.

Se ha llegado a pensar que con la reelección es posible que haya profesionalización y experiencia, es una de las formas de la profesionalización legislativa y se legislará con mayor conocimiento. Pero no podemos caer en un optimismo, esto no es una garantía de un buen gobierno.

Hoy, por disposición constitucional, existe la posibilidad de reelegirse los funcionarios públicos electos por voto libre y secreto.

Los senadores podrán ser electos hasta por dos periodos consecutivos y los diputados al Congreso de la Unión hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

Las constituciones de los estados deberán establecer la elección consecutiva para el mismo cargo de presidentes municipales, regidores y síndicos, por un periodo adicional, siempre y cuando el periodo del mandato de los ayuntamientos no sea superior a tres años. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que lo hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

Las constituciones estatales deberán establecer la elección consecutiva de los diputados a las legislaturas de los estados, hasta por cuatro periodos consecutivos. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que los hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato.

La reelección favorece porque crea profesionalismo y mayor técnica legislativa.

“Sufragio efectivo, sí reelección consecutiva”.

¡Me siento orgullosa de ser hija de estas hermosas tierras norteñas!