/ martes 7 de junio de 2022

Tenacidad al Emprender 

“No importa lo lento que vayas mientras no te detengas” – Confucio

Una de las características más importante que debe poseer un emprendedor es la TENACIDAD para hacer realidad sus sueños. Es la fuerza que impulsa a las personas a resistir ante las adversidades en pro de lograr una meta u objetivo. El ritmo de vida actual, nos hace querer todo rápido, fácil y con el menor esfuerzo posible. Por lo tanto una vez que emprendemos un negocio, queremos el éxito instantáneo, que a la primera vez que intentemos algo logremos los resultados deseados, pero nada más erróneo que esta creencia. No existe una fórmula mágica para triunfar al emprender un negocio. La mayoría de las historias de éxito han tenido que superar algún fracaso en su trayectoria. Los mejores empresarios tuvieron muchos malos negocios antes de conseguir el éxito y aprendieron a base de golpes. En consecuencia la tenacidad es la capacidad de no rendirte y seguir intentándolo varias veces es la mayor cualidad que un emprendedor puede desarrollar.

No hay algo que me dé más tristeza, que cuando algún conocido o amigo me dice que está a punto de cerrar o que cerró definitivamente su negocio por falta de resultados. Pero cuando le pregunto, que si cuál fue la razón o que por cuánto tiempo estuvo abierto , me contesta que un año o menos, que se desesperó por no lograr el éxito que pensaba. Si bien, algunos casos son críticos y es difícil seguir operando una empresa con números rojos, la mayoría de estos casos es por falta de tenacidad, por esa presión social que nos hace pensar que si no tienes ventas enormes los primeros meses, tu negocio no va a funcionar, pero no hay nada más alejado de la realidad que esta creencia. Una de las decisiones más difíciles al querer emprender es saber cuándo iniciar, y una vez que abres tu emprendimiento todo mundo te felicita, te da ánimos y te ayudan en las primeras semanas, pero cuando los meses pasan y la situación se empieza a poner difícil, donde la euforia de las primeras semanas ya no es la misma, donde tus amigos y familiares te dejan de comprar y recomendar, es ahí donde la situación se empieza a poner difícil, donde te empiezas a desanimar porque las ventas bajan drásticamente y empiezas a pensar si fue buena idea emprender o haberte quedado como estabas antes. Pero es justo en ese momento donde más fuerzas y ánimo debes de sacar. Es importante recordar que las decepciones y los fracasos acompañan incluso hasta los empresarios que consideramos más exitosos.

Es importante mentalizarse que nada es imposible, solo la falta de confianza y tenacidad hacen parecer inalcanzable lo posible. Por esto considero que es importante rodearse de gente emprendedora igual que tú, con los mismos problemas, miedos y fracasos, pero que también tengan la misma visión y el anhelo de alcanzar sus propias metas. Por ello, la importancia de pertenecer a redes, grupos u organismos empresariales, donde puedas compartir tus experiencias, platicar tus problemas, aprender de los fracasos de los demás para que tu no los vuelvas a repetir, estas y muchas más son las ventajas de relacionarte con demás emprendedores. El camino de un emprendedor es muy solitario, pero esto no quiere decir que no haya más personas en la misma situación que tú. Otra de las claves para no rendirte en el intento, es buscar un mentor empresarial, alguien que ya haya pasado por tu misma etapa y que pueda ayudarte a sobrellevarla. Un mentor puede ver tus debilidades y te ayudará a superarlas, es un confidente personal experimentado que te proporcionará consejos y que te hará trabajar duro. Recuerda, siempre hay una nueva oportunidad de empezar de cero, lo importante es tener la voluntad de empezar con las mismas ganas y ambiciones.


“No importa lo lento que vayas mientras no te detengas” – Confucio

Una de las características más importante que debe poseer un emprendedor es la TENACIDAD para hacer realidad sus sueños. Es la fuerza que impulsa a las personas a resistir ante las adversidades en pro de lograr una meta u objetivo. El ritmo de vida actual, nos hace querer todo rápido, fácil y con el menor esfuerzo posible. Por lo tanto una vez que emprendemos un negocio, queremos el éxito instantáneo, que a la primera vez que intentemos algo logremos los resultados deseados, pero nada más erróneo que esta creencia. No existe una fórmula mágica para triunfar al emprender un negocio. La mayoría de las historias de éxito han tenido que superar algún fracaso en su trayectoria. Los mejores empresarios tuvieron muchos malos negocios antes de conseguir el éxito y aprendieron a base de golpes. En consecuencia la tenacidad es la capacidad de no rendirte y seguir intentándolo varias veces es la mayor cualidad que un emprendedor puede desarrollar.

No hay algo que me dé más tristeza, que cuando algún conocido o amigo me dice que está a punto de cerrar o que cerró definitivamente su negocio por falta de resultados. Pero cuando le pregunto, que si cuál fue la razón o que por cuánto tiempo estuvo abierto , me contesta que un año o menos, que se desesperó por no lograr el éxito que pensaba. Si bien, algunos casos son críticos y es difícil seguir operando una empresa con números rojos, la mayoría de estos casos es por falta de tenacidad, por esa presión social que nos hace pensar que si no tienes ventas enormes los primeros meses, tu negocio no va a funcionar, pero no hay nada más alejado de la realidad que esta creencia. Una de las decisiones más difíciles al querer emprender es saber cuándo iniciar, y una vez que abres tu emprendimiento todo mundo te felicita, te da ánimos y te ayudan en las primeras semanas, pero cuando los meses pasan y la situación se empieza a poner difícil, donde la euforia de las primeras semanas ya no es la misma, donde tus amigos y familiares te dejan de comprar y recomendar, es ahí donde la situación se empieza a poner difícil, donde te empiezas a desanimar porque las ventas bajan drásticamente y empiezas a pensar si fue buena idea emprender o haberte quedado como estabas antes. Pero es justo en ese momento donde más fuerzas y ánimo debes de sacar. Es importante recordar que las decepciones y los fracasos acompañan incluso hasta los empresarios que consideramos más exitosos.

Es importante mentalizarse que nada es imposible, solo la falta de confianza y tenacidad hacen parecer inalcanzable lo posible. Por esto considero que es importante rodearse de gente emprendedora igual que tú, con los mismos problemas, miedos y fracasos, pero que también tengan la misma visión y el anhelo de alcanzar sus propias metas. Por ello, la importancia de pertenecer a redes, grupos u organismos empresariales, donde puedas compartir tus experiencias, platicar tus problemas, aprender de los fracasos de los demás para que tu no los vuelvas a repetir, estas y muchas más son las ventajas de relacionarte con demás emprendedores. El camino de un emprendedor es muy solitario, pero esto no quiere decir que no haya más personas en la misma situación que tú. Otra de las claves para no rendirte en el intento, es buscar un mentor empresarial, alguien que ya haya pasado por tu misma etapa y que pueda ayudarte a sobrellevarla. Un mentor puede ver tus debilidades y te ayudará a superarlas, es un confidente personal experimentado que te proporcionará consejos y que te hará trabajar duro. Recuerda, siempre hay una nueva oportunidad de empezar de cero, lo importante es tener la voluntad de empezar con las mismas ganas y ambiciones.