/ lunes 20 de junio de 2022

Trabajo en equipo vs la inseguridad

Por: Alejandro Domínguez

La seguridad de las familias debe ser una prioridad para todo orden de Gobierno; la vida, la libertad y la posibilidad de crecer en la sociedad son parte de los bienes más preciados que tenemos y que deseamos mantener en un ambiente sano.

Es notorio que vivimos un momento complicado en los temas de seguridad en el país, pero de manera particular en Chihuahua estamos pasando por un fenómeno delincuencial de alto impacto; acontecimientos hay muchos, basta mencionar los homicidios que se dieron en la sección municipal de El Sauz, en el municipio de Chihuahua; los hechos que se presentaron en el restaurante Denny’s de Ciudad Juárez y los diversos homicidios en el municipio de Cuauhtémoc, que ponen de manifiesto que algo está pasando, y ese “algo” desatendido es muy riesgoso para la sociedad.

Basta recordar los momentos más aciagos que vivimos en el estado entre 2007 y 2011: secuestros, extorsión, cobro de derecho de piso, robo de vehículo a mano armada en las calles, homicidios de alto impacto cometidos contra policías, ministerios públicos, abogados, balaceras en la vía pública, entre otros, que generaron un clima de psicosis colectiva, una parálisis social y, con ello, un momento de alta tensión en la sociedad chihuahuense.

Sin embargo, diversas acciones se realizaron, tomando experiencias de otras partes del mundo y asumiendo un compromiso de suma, inclusión y diálogo entre la sociedad; la experiencia de Palermo fue tomada en cuenta en Chihuahua en 2010, Leo Lucca Orlando planteó, ante los embates de la mafia, la construcción de una estrategia sistemática, que requería la participación de todos los sectores de influencia en la sociedad, sector académico, medios de comunicación, cámaras empresariales, iglesias, policías, integrantes de los tres poderes del Estado, líderes comunitarios; con una visión integral se desplegó una estrategia que permitiera despertar en la ciudadanía los valores que unifican a la sociedad y en sentido de pertenencia a la ciudad de Palermo; esto se hizo en Chihuahua.... ¿lo recuerdas?

Se creó un solo mando policial, se creó el Consejo Estatal de Seguridad Pública con participación ciudadana, se creó la Ley de Cultura de la Legalidad, la Ley de Prevención Social de la violencia con participación ciudadana, se implementaron mesas de trabajo entre los tres poderes del Estado para generar reformas al sistema de justicia penal para sancionar con mayor severidad los homicidios cometidos contra policías, se creó la prisión vitalicia como medida sancionadora ejemplar para quien secuestrara, extorsionara y atentara contra los bienes más preciados de la persona, la vida y la libertad.

Siempre se ha dicho que en el tema de seguridad una parte la hace el Gobierno y otra la sociedad, es como una vehículo de dos ruedas que si no logramos que las dos giren a la par, estaremos girando en círculos sin avanzar hacia adelante; los cambio no son inmediatos, si se descuidan los esfuerzos ya realizados, como paso en los últimos 5 años en el Estado, se presentan los hechos que actualmente estamos viviendo. La continuidad de una estrategia, con los ajustes necesarios acordes al momento, dan un resultado, por eso aventar culpas es muy riesgoso, es un discurso cómodo, pero muy peligroso para la sociedad. La película de la inseguridad en el Estado ya la vimos y, al menos yo, no quiero volver a verla, ni repetir capítulos de esa serie; por ello, se hace necesario actuar, coordinadamente, sumarnos o proponer una estrategia incluyente, donde sociedad y Gobierno actuemos de manera transparente, decidida y con una visión de corto, mediano y largo plazo.

Es tiempo de hacer equipo y no dividirnos con este tema, a nadie nos conviene.


ALEX DOMÍNGUEZ


Por: Alejandro Domínguez

La seguridad de las familias debe ser una prioridad para todo orden de Gobierno; la vida, la libertad y la posibilidad de crecer en la sociedad son parte de los bienes más preciados que tenemos y que deseamos mantener en un ambiente sano.

Es notorio que vivimos un momento complicado en los temas de seguridad en el país, pero de manera particular en Chihuahua estamos pasando por un fenómeno delincuencial de alto impacto; acontecimientos hay muchos, basta mencionar los homicidios que se dieron en la sección municipal de El Sauz, en el municipio de Chihuahua; los hechos que se presentaron en el restaurante Denny’s de Ciudad Juárez y los diversos homicidios en el municipio de Cuauhtémoc, que ponen de manifiesto que algo está pasando, y ese “algo” desatendido es muy riesgoso para la sociedad.

Basta recordar los momentos más aciagos que vivimos en el estado entre 2007 y 2011: secuestros, extorsión, cobro de derecho de piso, robo de vehículo a mano armada en las calles, homicidios de alto impacto cometidos contra policías, ministerios públicos, abogados, balaceras en la vía pública, entre otros, que generaron un clima de psicosis colectiva, una parálisis social y, con ello, un momento de alta tensión en la sociedad chihuahuense.

Sin embargo, diversas acciones se realizaron, tomando experiencias de otras partes del mundo y asumiendo un compromiso de suma, inclusión y diálogo entre la sociedad; la experiencia de Palermo fue tomada en cuenta en Chihuahua en 2010, Leo Lucca Orlando planteó, ante los embates de la mafia, la construcción de una estrategia sistemática, que requería la participación de todos los sectores de influencia en la sociedad, sector académico, medios de comunicación, cámaras empresariales, iglesias, policías, integrantes de los tres poderes del Estado, líderes comunitarios; con una visión integral se desplegó una estrategia que permitiera despertar en la ciudadanía los valores que unifican a la sociedad y en sentido de pertenencia a la ciudad de Palermo; esto se hizo en Chihuahua.... ¿lo recuerdas?

Se creó un solo mando policial, se creó el Consejo Estatal de Seguridad Pública con participación ciudadana, se creó la Ley de Cultura de la Legalidad, la Ley de Prevención Social de la violencia con participación ciudadana, se implementaron mesas de trabajo entre los tres poderes del Estado para generar reformas al sistema de justicia penal para sancionar con mayor severidad los homicidios cometidos contra policías, se creó la prisión vitalicia como medida sancionadora ejemplar para quien secuestrara, extorsionara y atentara contra los bienes más preciados de la persona, la vida y la libertad.

Siempre se ha dicho que en el tema de seguridad una parte la hace el Gobierno y otra la sociedad, es como una vehículo de dos ruedas que si no logramos que las dos giren a la par, estaremos girando en círculos sin avanzar hacia adelante; los cambio no son inmediatos, si se descuidan los esfuerzos ya realizados, como paso en los últimos 5 años en el Estado, se presentan los hechos que actualmente estamos viviendo. La continuidad de una estrategia, con los ajustes necesarios acordes al momento, dan un resultado, por eso aventar culpas es muy riesgoso, es un discurso cómodo, pero muy peligroso para la sociedad. La película de la inseguridad en el Estado ya la vimos y, al menos yo, no quiero volver a verla, ni repetir capítulos de esa serie; por ello, se hace necesario actuar, coordinadamente, sumarnos o proponer una estrategia incluyente, donde sociedad y Gobierno actuemos de manera transparente, decidida y con una visión de corto, mediano y largo plazo.

Es tiempo de hacer equipo y no dividirnos con este tema, a nadie nos conviene.


ALEX DOMÍNGUEZ