Por: Jesús Valenciano
Si bien es cierto que “La gran extensión territorial del país así como la diversidad climática y poblacional, hace que en México coexistan diversas realidades y procesos de desarrollo” (Medina, A. 2020) que hacen prácticamente imposible el crecimiento equitativo basado sólo en un plan de desarrollo nacional, también es cierto que “…no es posible propiciar transformaciones importantes en los territorios (a nivel meramente local/municipal)… pues el cambio progresivo nunca proviene únicamente desde dentro del territorio, los procesos del entorno nacional y externo inciden fuertemente y reducen la autonomía de los territorios” (Masís, G., 2020).
Aquí es donde, desde lo local, surge la necesidad de emplear un modelo de planeación para el desarrollo que de manera asertiva considere la realidad tanto del país, como de los municipios colindantes; dando paso a la planeación de crecimiento regional.
El desarrollo regional permite tratar problemas como la pobreza y el desempleo de manera más eficiente que si se buscaran resolver a escala nacional y con mayor alcance, incluso financiero, que si se buscara solución sólo a nivel local.
Desde el año pasado, instituciones como el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) han buscado impulsar cada vez más iniciativas que promuevan el desarrollo de municipios y ciudades basados en la sustentabilidad y vocación productiva, pero dando especial atención al crecimiento en conjunto: enfoque regional.
Como menciona el analista German Masís, los programas de desarrollo regional debieran incluir objetivos y metas que permitan equidad en el acceso y uso de inversión pública y privada, con la participación de distintos actores que generen capacidades para reducir la pobreza y la desigualdad entre los territorios.
Si todos vamos a crecer, por qué no enfocarnos a crecer parejos, juntos, pensando como una sola región.
Basados en todo esto el pasado mes de junio, en Delicias, nos tocó ser sede e impulsores de la Asamblea Regional Delicias 2022, cuyo objetivo es coadyuvar la creación de comités regionales Coplade y la consolidación de un modelo de desarrollo para nuestra región centro-sur, siguiendo el programa conocido en la capital como Chihuahua Futura, acá Unión Centro-Sur Futura, al que nos invitó hace algunos años nuestra amiga, hoy gobernadora Maru Campos.
A partir de aquí alcaldes y alcaldesas de los municipios de la región, junto con autoridades de los tres niveles de gobierno, como el secretario de Desarrollo Rural del Estado, Mauro Parada; el Lic. Ernesto López Echevarría, del Consejo para el Desarrollo Económico del Estado de Chihuahua (Codech); el subsecretario de Coordinación de Gabinete en representación del Lic. Luis Serrato, el Ing. Mauro Parada, secretario de Desarrollo Rural, Obras Públicas, así como directivos del sector productivo, académico y social, asumimos el compromiso de hacer crecer nuestra región y reactivar la economía de la mano de la firma IDOM.
Como lo he pensado siempre, si cada vez hay más relación entre nuestras comunidades y ciudades siendo “…un territorio funcional en el que cada sector depende del otro…” (Masís, G., 2020), debemos asumir un enfoque que abarque mucho más allá de la delimitación de nuestro propio municipio. Otra vez, si el objetivo de todos es crecer enfoquémonos en crecer parejo bajo un mismo modelo. Para esto debemos dejar de pensar como ciudad y empezar a pensar como región.
Maestro en Administración. Alcalde de Delicias.
jesusvalenciano@gmail.com
