Material, ubicación, servicios básicos, seguridad y plusvalía son algunos de los principales factores que se consideran para invertir en tu nuevo hogar, sin embargo esos son los problemas más comunes que las viviendas de Chihuahua presentan actualmente.
Por ello el gobierno debe implementar mecanismos de coordinación con las desarrolladoras, para encontrar puntos geográficos adecuados que permitan a las familias tener un desarrollo humano ideal; pues precisamente las familias deben ser el centro de las acciones y estrategias que el gobierno implementa. Generar las condiciones oportunas para su bienestar también implica que donde vivan cumplan con especificaciones técnicas y que se dirijan hacia tecnologías ecológicas que pocas edificaciones tienen actualmente.
La creciente preocupación global por los problemas ambientales ha hecho que cada vez sea más urgente encontrar soluciones habitacionales más respetuosas con el medio ambiente y que nos permitan desarrollar un estilo de vida más sostenible. Como solución a este tema nace el concepto de casas ecológicas, viviendas diseñadas para controlar o disminuir con la huella ecológica humana; este tipo de viviendas deben conseguir la optimización de los recursos en construcción y uso, por lo que su diseño debe hacer aprovechar los recursos naturales que ofrece el entorno de emplazamiento. El uso de materiales y las técnicas de construcción deben tener como principal objetivo la eficiencia energética y el mejoramiento visual de la ciudad.
El análisis de la evolución social dentro de Chihuahua, a través del crecimiento poblacional y su distribución demográfica hacen replantear al gobierno y a las desarrolladoras la estructura y las formas de organización poblacional. Con esto, cambiamos las características psicosociales de los habitantes de Chihuahua en un sentido de cultura ecológica, que se vincula estrechamente con la complejidad del desarrollo urbano de las ciudades más grandes del estado. Hay que aceptar que si no tomamos acciones en este sentido de manera inmediata correremos el riesgo de tener ciudades con recursos deficientes.
Analizar la geografía y el ecosistema de la región permitirá obtener información necesaria para determinar las necesidades en infraestructura y la calidad de vida de las personas que habiten en ella, las características de las nuevas viviendas deben incorporar el futuro ecológico de la zona habitable en que se encuentren. Esto lo están haciendo muchas ciudades competitivas en muchas partes del mundo, Chihuahua no debe quedarse atrás.
Por último, es necesario saber que implementar construcciones ecológicas no significa destinar recursos únicamente para zonas habitacionales de alta gama, sino que éstas pueden significar la respuesta para aquellas personas que no pueden pagar viviendas y requieren de subvenciones especiales para poder tener un hogar digno. El gobierno debe orientar sus esfuerzos en materiales y suelo que no comprometan las finanzas personales de familias de escasos recursos, permitiéndoles adquirir bienes inmuebles donde puedan habitar con servicios a bajos costos. Esto tendrá un efecto positivo directo a las familias correspondientes a etnias indígenas.
La tarea de concientización en la mejora de espacios habitacionales es tarea de todos: gobierno, iniciativa privada, organizaciones de la sociedad civil y la academia; pues a todos nos interesa habitar en un estado solidario con el medio ambiente y donde la mancha urbana tenga factores determinantes para incrementar los índices del desarrollo humano, que todas las familias satisfagan sus necesidades más básicas para vivir, en un entorno sano y funcional. Por las siguientes generaciones, espero empecemos a marcar el rumbo hacia una nueva forma de vivir y aprovechar la tierra.