Una de las catadoras de vinos reconocidas de Chihuahua es Jannet Ochoa Armendáriz quien actualmente está fortaleciendo la cultura del vino, de las bebidas espirituosas y productos locales del estado de Chihuahua, a través de la representación, distribución, difusión y promoción en la zona de Occidente-Bajío, de igual forma está reforzando la formación continua por medio de las alianzas nacionales e internacionales con la Escuela Mexicana de Sommeliers y la representación de la Asociación Italiana de Sommeliers para ofrecer diplomados, cursos, talleres y promover la segunda generación de Sommelier: catador profesional, capacitados en el servicio y conocimiento del vino.
“Chihuahua tiene la grandeza de contar con varios estilos, desde vinos blancos y rosados con burbuja, hasta vinos blancos tranquilos, rosados, tintos ligeros de medio y gran cuerpo. Vinos que han armonizado de una manera espectacular con su cocina, desde vinos platicadores hasta estructurados y complejos. Según la zona donde se encuentre la vid, vamos a identificar características extraordinarias con base a su terroir: tipo de uva, micro, macro climas y todos los diversos factores que conllevan en disfrutar vinos aromáticos, con una acidez y frescura media, alcohol presente y equilibrado además de una gran permanencia disfrutando una experiencia inigualable. Hablar de los mejores vinos sería un gusto personal ya que en Chihuahua se cuenta con extensa variedad de vinos de gran calidad para todos los gustos”, informó Jannet.
De igual forma habló sobre su formación en este campo: “Tuve mi preparación en la ciudad de Guadalajara, cuando hace 16 años comenzaba el interés por el vino; egresada de la segunda generación de Sommelier avalada por la Asociación Mexicana de Sommeliers AC y cofundadora de la Organización Nacional de Sommeliers de México, además de lograr el aval internacional por parte de la Asociación Italiana de Sommeliers, de la cual soy representante en el estado de Chihuahua. Desde el 2021 cree una alianza con la Escuela Mexicana de Sommeliers que cuenta con instructores nivel Advance de la WSET.
“Aquí en México aún no es una carrera (estamos trabajando para ello), actualmente es un oficio que se ha estado profesionalizando a lo largo de los últimos 10 años, donde para ser sommelier profesional se requiere un mínimo de 150 horas y otras más de práctica, sólo en el tema de vinos y servicio… 100 horas para el tema de destilados, más de 100 horas para temas de café, puro, chocolate, quesos, conocimientos básicos de gastronomía y más…”.
Sobre la visualización del mercado del vino en Chihuahua, dice, “hay todo el potencial del mundo en un solo estado, creo que si todos trabajamos unidos podemos lograr un crecimiento con estructura, profesionalismo y lograr que Chihuahua sea reconocido además de su agricultura y ganadería, como un territorio vitivinícola con una expresión única y retomar su historia”, finalizó.
FRASE:
Más que tomar mucho vino, es importante conocer los estilos (recordemos que contamos con 10,000 variedades de uva con las que se elaboran los vinos en el mundo), para hablar de un vino bueno debemos tener conciencia de todo su proceso del campo hasta la copa