Y usted ¿sabe lo que come? ¿Se ha puesto a pensar que esos totopos que se come con un delicioso guacamole fueron preparados con higiene? ¿o si el aceite ya es viejo y la cacerola está atestada de mugre?. La Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios revisa a diario más de una decena de establecimientos que preparan comida. Muchos son suspendidos debido a la forma tan deplorable en que se preparan. Durante un mes, se brindaron 619 capacitaciones para manejadores de alimentos.
La ingeniera Martha Aurora Contreras García, gerente de Autorización y Dictamen Sanitario de COESPRIS explicó que en muchas ocasiones, las personas se molestan porque les suspenden su establecimiento al no cumplir con las mínimas normas de salubridad.
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Las revisiones de COESPRIS se fundamentan en la presencia de fauna nociva, la preparación y manejo de alimentos, medidas de protección e higiene que realizan los que elaboran los alimentos; así como la materia prima y su conservación, almacenamiento y si estaba refrigerado en el trayecto.
“Nuestro deber es cuidar a la población en general, a las personas que están expuestas a consumir esos productos. La actividad debe realizarse dentro de un marco legal y sanitario”.
La ingeniera destacó que solo agua, jabón y agua es lo que se requiere para mantener limpio el establecimiento.
Cuando se detectan condiciones desfavorables y que pueden derivar en un riesgo para la salud, se procede a cerrar el “changarro” para que corrijan las irregularidades y dejen en condiciones adecuadas su establecimiento.
Explicó que hay establecimientos que ven en las revisiones una oportunidad de mejora, pues así como hay establecimientos en muy malas condiciones, también hay otros que manejan de manera puntual sus bitácoras de sanitarias porque están conscientes de la labor que realizan.
El doctor Luis Carlos Tarín Villamar, comisionado Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios señaló que en todas las cocinas hay fauna nociva, incluso en los hogares. “Mi negocio es una extensión de mi casa”.
En el mes de mayo se realizaron 619 asesorías y se brindaron 20 pláticas de normatividad, a fin de que los propietarios o encargados de establecimientos cumplan con las normas.
La comisión brinda capacitación a los manejadores de alimentos para que de una manera sencilla, puedan llevar su bitácora de limpieza y tengan los controles necesarios.
En la COESPRIS la Gerencia de Fomento Sanitario se encarga de capacitar y fomentar las buenas prácticas en los 180 giros que revisa la dependencia.
De acuerdo a las estadísticas, de enero se impartieron 12 cursos enfocados a la normatividad para que los encargados de los establecimientos conozcan las normas sanitarias que les aplican. Además, se entregaron mil 500 materiales de difusión.
El comisionado destacó que la gente cada vez más está pidiendo capacitación, a fin de brindar un mejor servicio.
Hay acciones muy sencillas que en los establecimientos se pueden realizar como es: no dejar destapado el bote de basura, dado que eso es alimento para la fauna nociva, por eso debe haber higiene y buen manejo de residuos, para que la fauna no prolifere al encontrar casa y alimento.
Mucho del manejo de la fauna nociva es el control integral, dado que el riesgo cero no existe, pero entre más limpio se tenga, con la disposición adecuada de residuos y el certificado de fumigación se puede estar libre de fauna nociva.
Es un problema que no es exclusivo, ya que depende de la cultura de la gente, se han encontrado en lugares en colonias precarias, al igual que en grandes almacenes y restaurantes.
Mantener una presencia constante con las revisiones permite que la ciudadanía pueda consumir productos bien preparados bajo las normas higiénicas, destacó la gerente de autorización.
