Hoteles de Chihuahua capital presentan pérdidas por alrededor del 80% en relación con lo que esperaban este 2020, tal es el caso de los hoteles Fiesta Inn y ONE que tenían expectativas de ocupación de un 52%, pero a la fecha oscila entre el 15 y 20%.
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“Nuestra expectativa era una pronta recuperación y que en un lapso de dos o máximo tres meses pudiéramos reaperturar; sin embargo, no fue así”, declaró Iván Fonseca, gerente de ambos hoteles localizados en el periférico De la Juventud, quien detalló que registraron pérdidas de aproximadamente 700 mil pesos por cada mes que no operaron, en un solo hotel.
Detalló que desde el pasado 7 de abril pararon temporalmente labores en el Fiesta Inn, mientras que en el Hotel ONE fue unos días antes. Este primero apenas reabrió el 17 de agosto con todas las medidas y protocolos de seguridad como los marcan los gobiernos estatales y federales; pero el ONE aún permanece cerrado.
El entrevistado informó que en 2019 tuvieron una ocupación hotelera del 48% y que esperaban tener un aumento de al menos tres puntos porcentuales para este 2020, alcanzado el 51-52%, pero se vieron mermados durante estos cuatro meses por la pandemia y actualmente las ocupaciones en la Plaza “no son muy alentadoras”, ya que radican entre el 15 y 20% de ocupación en los hoteles del periférico De la Juventud.
Fonseca manifestó que vislumbran un complicado cierre de año, en lo particular, en el Fiesta Inn están realizando una reestructuración, sobre todo de la manera de operar: anteriormente manejaban desayuno-buffet, y ahora todo tiene que ser emplatado, en atención a las medidas de la nueva normalidad, lo que genera un impacto fuerte con la gente local porque ya no resulta igual de atractivo y las pérdidas son en un 80% aproximadamente, de lo que esperaban.
Lo anterior, se traduciría en una pérdida de unos 15 millones de pesos de utilidad, tan sólo en el Fiesta Inn, para este año.
“Estamos todos sujetos al cambio del semáforo; esperamos que en las próximas semanas o en al menos no más de un mes, cambiemos a amarillo y podamos ir recuperando ciertas funcionalidades o actividades”, añadió el gerente.
Y es que cabe recordar que a la fecha el decreto marca un aforo de 30% en hoteles, teniendo impedido el uso de áreas comunes; además, en los salones sólo deben haber 10 personas al mismo tiempo, lo que no resulta benéfico para los hoteles, ya que no se compara con un coffee break de 100 individuos, por ejemplo.
Aparte, en el restaurante del hotel hay que acatar ciertas medidas; no se permite el uso del gimnasio, no está disponible la alberca, aunque Fonseca destacó se han ido liberando ciertas acciones, en comparación con las anteriores restricciones, lo que ha ayudado a poder ir incrementando los ingresos paulatinamente.
“No son evidentemente lo que esperamos, pero lo que tratamos es que ya no tengamos la pérdida que veníamos registrando, porque había que seguir pagando a empleados aunque estuviéramos cerrados; así como servicios, gastos de seguridad, entre otras cuestiones”, dijo, al momento que comunicó que mes a mes estuvieron perdiendo unos 700 mil pesos.
Por otro lado, dijo estar consciente de que primero es la salud y que, también, dicho giro se terminará de restablecer en relación con el sector económico e industrial, explicando que los primeros en llegar a sus capacidades son toda la parte de las maquilas y otras empresas; entonces una vez que empiecen a operar en su totalidad, comenzarán a mandar a su gente a viajar y necesitarán hospedaje en hoteles de Chihuahua.
Cabe mencionar que el Hotel Fiesta Inn tiene casi tres años en operaciones, al igual que el Hotel One, sólo tienen un mes de diferencia en cuanto a inauguración.
Finalmente, el entrevistado destacó que en los hoteles de la Plaza, y sobre todo los que están a su cargo, están tomando todas las medidas pertinentes para mayor seguridad del cliente, de hecho, en este tema se tiene contemplada una inversión de alrededor de 100 mil pesos en equipos de protección y en químicos para sanitizaciones, a fin de brindar las medidas higiénicas necesarias.
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