Los servicios de banquetes para eventos sociales es uno de los sectores fuertemente afectados en esta contingencia sanitaria, al sufrir las consecuencias de que los salones de eventos no sean incluidos en la reapertura con el semáforo naranja.
Con la actividad de los salones de eventos detenida por disposiciones de las autoridades gubernamentales, ante la contingencia sanitaria, los medianos y pequeños empresarios dedicados al servicio de comida en reuniones de este tipo son uno de los sectores de la población afectados de manera indirecta por la medida.
De acuerdo con Omar Ríos, dueño de la empresa Los Socios, dedicada a brindar el servicio de comida en eventos masivos y en salones de fiestas, desde el inicio de la contingencia sanitaria a la fecha ha perdido 15 eventos que fueron programados con anterioridad, lo que representa una pérdida monetaria de 15 mil pesos.
Al ser su negocio el único sustento económico, Ríos se vio en la necesidad de vender un local comercial donde planeaba establecerse de forma fija para ofrecer un servicio de comedor con la esperanza de recibir más ingreso.
“La gente empieza a preguntar para eventos de 30 personas, preguntan, pero nadie confirma. En este tipo de negocios se sobrevive por recomendaciones, si das un buen servicio en un evento del viernes, te surgen contratos para sábado y domingo”, explicó.
De tal manera que con la prohibición de los eventos sociales el nuevo negocio de Ríos decayó antes de comenzar a percibir ganancias que le regresaran la inversión realizada para iniciar a principios del año en curso.
Al ser su único ingreso, durante los meses anteriores de la contingencia sanitaria estuvo vendiendo comida para llevar desde su casa para poder sobrevivir, pero las ventas no han sido suficientes ante el golpe económico que sufren las familias chihuahuenses.
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