SANTA BÁRBARA, Chih., (OEM-Informex).-- Tras un deslave, un gambusino quedó atrapado en mina de Santa Bárbara. Según versiones, se trata de un menor de edad, quien hasta el cierre de edición permanecía aplastado entre grandes piedras, aunque consciente.

Un menor de edad que trabaja como gambusino en una mina en Santa Bárbara, sufrió un accidente en el que quedó atrapado por rocas y escombro que cayeron sobre su cuerpo; rescatistas de la empresa Grupo México acudieron en su ayuda.

Atrapado entre escombro y rocas ubicaron al joven, quien permaneció ahí por largas horas; tiene una edad aproximada a los 16 años y se le conoce como “Chu”. En el lugar se dijo que tenía pocos días laborando en la mina, por lo cual poco saben de él.

Compañeros que ayudaban en el rescate, dijeron que todo el tiempo permaneció consciente, pues señalaron que está atrapado por las piernas sin haber sufrido lesiones en partes en las que no hay riesgo para la vida.

Hasta el término de la edición aún se encontraban tratando de rescatarlo; se espera que en el transcurso del día emitan información oficial del accidente.

LABORES DE RESCATE

Los propios gambusinos y rescatistas de la Minera Grupo México coadyuvaron para intentar sacar al joven que, por largas horas, permaneció entre escombro; durante el tiempo que duró el rescate una ambulancia aguardaba cerca de la mina.

Cuando se escuchaban rumores de que ya venía, todos sus compañeros que esperan afuera se abalanzaban con la esperanza de verlo bien; sin embargo, en muchas ocasiones era un rescatista que pedía herramienta para seguir haciendo su labor.

En el lugar de los hechos se habló que eran grandes rocas las que lo tenían atrapado y que debían destruirlas poco a poco con marro y cincel.

Asimismo, siempre estuvo consciente. El mayor problema era la falta de oxígeno, pues el joven tenía una mascarilla, pero no los rescatistas, quienes tenían que salir de vez en cuando para no perder el conocimiento, aunque lo hacían divagando a causa de la falta de aire.

EL PELIGRO DE SER GAMBUSINO…

Durante las horas que duró el rescate, en el lugar permanecieron compañeros que se turnaban para ayudar, mientras hablaban entre ellos lo peligroso que es ser gambusino.

Aunque dicen que se gana poco dinero, es la única manera que tienen para llevar sustento a sus casas y para algunos es una labor que ha perdurado por generaciones.

Refirieron que no tienen apoyo de ningún tipo, la seguridad es escasa, están todo el tiempo a la expectativa de sufrir algún accidente; “todos los días entramos, pero no sabemos si vamos a salir con vida”, dicen.