/ jueves 21 de noviembre de 2019

Aprendió Nicole a vivir con diabetes

Tras enfermar y estar en terapia intensiva, a la menor de 9 años le detectaron la enfermedad, un "compañero" de por vida

Nicole es la mayor de dos hermanas, siempre fue una niña muy sana y cuando se llegaba a enfermar nunca pasaba de un resfriado común, siempre ha sido una niña muy tranquila, amorosa, responsable y aplicada hasta que llegó un diagnóstico que cambió la vida de toda su familia.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL HERALDO DE CHIHUAHUA DIRECTO EN TU WHATSAPP, DA CLIC PARA SUSCRÍBIRTE

Todo comenzó con un mal diagnóstico: un supuesto resfriado, que le provocaba mucha sed, constantes idas al baño y mucha hambre, síntomas que para su familia no resultaban alarmantes, pero en dos días ya estaba acompañado de vómito y pérdida del conocimiento, que se convirtió en neumonía y cetoacidosis, provocando que terminara en terapia intensiva por un coma diabético, y así comenzó su vida con diabetes mellitus tipo 1.

Actualmente, a sus nueve años, Alexa Nicole es una niña consciente de su condición de vida, es una niña que lleva una vida normal, puede correr, jugar, viajar, comer de todo, practicar cualquier deporte, incluso, volar entre telas multicolores, en su disciplina que es danza aérea.

La condición que presenta no ha afectado su vida escolar, al contrario, en la escuela es muy aplicada tanto que ha sacado reconocimientos por obtener el primer lugar en desempeño y aprovechamiento. Siempre contamos con el apoyo de todos sus profesores, lo que aporta tranquilidad a la pequeña Nicole y a su mamá Yannet.

“Es una niña muy feliz que ya ha aceptado y ha dado la bienvenida a un compañero de por vida, a un motivo para estar alerta constante y seguir aprendiendo todos los días a cuidarse para una mejor calidad de vida. Así es la diabetes, simplemente aparece como un resfriado, pero éste no se va...”, comentó Yannet, quien apoya y esfuerza a su hija para ser feliz, y a pesar de todos los obstáculos, encontrar el lado dulce de la vida.

“Al principio sí es muy difícil, pero ahorita ya es una condición de vida, ya es normal, para nosotros, en nuestro refri, ya come de todo, pero todo con medida. Todos los días aprendemos algo nuevo. Ella está consciente, estuvo en terapia intensiva, por una alta, ha estado en coma diabético, entonces, ella ya sabe, yo me sentía morir. Dios es el único que sabe cómo me sentía y Él que nos ha sacado adelante”, dijo.

Finalmente, extendió un consejo a los padres con hijos que han sido diagnosticados recientemente con diabetes, y los invitó a no tener miedo, a estar al pendiente de dónde están los niños. Si ven alguna sintomatología que los alerte, realizar todos los estudios con el fin, de estar diagnosticados. También a que los acompañe un psicólogo en el proceso.

“Y no pasa nada; simplemente es comer sano, como deberíamos comer todo. El deporte es muy importante, hasta ir a correr al parque, mínimo media hora, ayuda a la insulina”, finalizó.

Familia y deporte "armas" de Víctor

Víctor o Vic, es el hermano mayor de 3 hermanos, desde pequeño fue un niño muy inteligente, siempre fue un niño muy sano, enfrenta el combate a la diabetes con conciencia, a pesar de su corta edad de nueve años, con la disciplina del kung fu, el amor de su familia y una alimentación balanceada que le da el impulso para vivir una infancia plena y feliz.

“Días antes de ser diagnosticado se enfermó de la panza. Pensé que de nervios porque días antes le había dicho que su abuela había salido de viaje, un año antes su bisabuelita había tenido un accidente y con ello falleció. Lo llevé al doctor, y me dijo que era infección. Le dieron su respectivo medicamento y yo me confié”, relató su mamá María Elena, sin imaginar que esos síntomas serían el preámbulo del diagnóstico que cambió sus hábitos y los de toda la familia.

Fue en un periodo vacacional, por lo que no le extrañó que el pequeño Vic durmiera por largos periodos, y que tomara excesiva agua, atribuyéndolo al calor veraniego.


“Dos días antes se fue a casa de su abuela y ella lo llevó con un pediatra ya que él estaba bajando demasiado peso de un día para otro, la doctora le dio pase para análisis, pero esa noche Víctor tenía mucha sed y se tomó una soda en la madrugada y le dolió la panza tanto que empezó a llorar demasiado. Tanto que mi mamá y mis hermanos se lo llevaron de urgencias al hospital eran las 5:00 de la mañana. Llegó con signos rojos, me explicaron que lo primero que le hicieron fue hacerle un control de glucosa y ya marcaban los 700”, narró María Elena.

Posteriormente, entró a terapia intensiva y fue diagnosticado ahí con diabetes mellitus tipo 1, con cetoacidosis. Víctor había bajado de peso 8 kilogramos o más en tan solo dos días. Permaneció internado tres días en terapia intensiva y de ahí a piso en lo que le encontraban o medían con mayor precisión la dosis para recetarle insulina y darlo de alta para poder salir a casa.

“Es un golpe muy duro que no me imaginaba que iba a pasar de la noche a la mañana. Pensaba por los síntomas que era una deshidratación, ya que no estaba informada que así también se podía diagnosticar en niños además de ciertos síntomas, pues se parecen a los síntomas de deshidratación, a dos semanas de salir del hospital nos recomendaron la asociación Akam Sura y estaba próximo su campamento. Para nosotros fue una bendición, ya que Víctor aún no entendía mucho su enfermedad ya que en ese momento todo mundo le decía ‘No comas esto’, ‘no hagas esto’, ‘Víctor inyéctate’, y pues de la noche a la mañana es muy difícil, pero cuando fue al campamento su vida cambió llegó contento, vio que otros niños estaban en su misma condición, vio cómo se inyectaban y eso le ayudó a él mucho”, compartió.

Desde su diagnóstico ha pasado un año y tres meses, y ahora Víctor es un niño muy valiente, pues se inyecta de 4-5 veces diarias y se revisa la glucosa seis o más veces.

“Maduró pronto y entendió su enfermedad, sus compañeros en la escuela le ayudan mucho y ya saben qué debe o no comer, su profesor le permite checarse si se siente mal y está atento y hay bastante comunicación para su mejoría, en la familia cambiaron nuestros hábitos alimenticios y familia externa cuando hay reuniones trata de adaptarse a él para ser todos uno solo”, finalizó.

Te recomendamos:

Nicole es la mayor de dos hermanas, siempre fue una niña muy sana y cuando se llegaba a enfermar nunca pasaba de un resfriado común, siempre ha sido una niña muy tranquila, amorosa, responsable y aplicada hasta que llegó un diagnóstico que cambió la vida de toda su familia.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL HERALDO DE CHIHUAHUA DIRECTO EN TU WHATSAPP, DA CLIC PARA SUSCRÍBIRTE

Todo comenzó con un mal diagnóstico: un supuesto resfriado, que le provocaba mucha sed, constantes idas al baño y mucha hambre, síntomas que para su familia no resultaban alarmantes, pero en dos días ya estaba acompañado de vómito y pérdida del conocimiento, que se convirtió en neumonía y cetoacidosis, provocando que terminara en terapia intensiva por un coma diabético, y así comenzó su vida con diabetes mellitus tipo 1.

Actualmente, a sus nueve años, Alexa Nicole es una niña consciente de su condición de vida, es una niña que lleva una vida normal, puede correr, jugar, viajar, comer de todo, practicar cualquier deporte, incluso, volar entre telas multicolores, en su disciplina que es danza aérea.

La condición que presenta no ha afectado su vida escolar, al contrario, en la escuela es muy aplicada tanto que ha sacado reconocimientos por obtener el primer lugar en desempeño y aprovechamiento. Siempre contamos con el apoyo de todos sus profesores, lo que aporta tranquilidad a la pequeña Nicole y a su mamá Yannet.

“Es una niña muy feliz que ya ha aceptado y ha dado la bienvenida a un compañero de por vida, a un motivo para estar alerta constante y seguir aprendiendo todos los días a cuidarse para una mejor calidad de vida. Así es la diabetes, simplemente aparece como un resfriado, pero éste no se va...”, comentó Yannet, quien apoya y esfuerza a su hija para ser feliz, y a pesar de todos los obstáculos, encontrar el lado dulce de la vida.

“Al principio sí es muy difícil, pero ahorita ya es una condición de vida, ya es normal, para nosotros, en nuestro refri, ya come de todo, pero todo con medida. Todos los días aprendemos algo nuevo. Ella está consciente, estuvo en terapia intensiva, por una alta, ha estado en coma diabético, entonces, ella ya sabe, yo me sentía morir. Dios es el único que sabe cómo me sentía y Él que nos ha sacado adelante”, dijo.

Finalmente, extendió un consejo a los padres con hijos que han sido diagnosticados recientemente con diabetes, y los invitó a no tener miedo, a estar al pendiente de dónde están los niños. Si ven alguna sintomatología que los alerte, realizar todos los estudios con el fin, de estar diagnosticados. También a que los acompañe un psicólogo en el proceso.

“Y no pasa nada; simplemente es comer sano, como deberíamos comer todo. El deporte es muy importante, hasta ir a correr al parque, mínimo media hora, ayuda a la insulina”, finalizó.

Familia y deporte "armas" de Víctor

Víctor o Vic, es el hermano mayor de 3 hermanos, desde pequeño fue un niño muy inteligente, siempre fue un niño muy sano, enfrenta el combate a la diabetes con conciencia, a pesar de su corta edad de nueve años, con la disciplina del kung fu, el amor de su familia y una alimentación balanceada que le da el impulso para vivir una infancia plena y feliz.

“Días antes de ser diagnosticado se enfermó de la panza. Pensé que de nervios porque días antes le había dicho que su abuela había salido de viaje, un año antes su bisabuelita había tenido un accidente y con ello falleció. Lo llevé al doctor, y me dijo que era infección. Le dieron su respectivo medicamento y yo me confié”, relató su mamá María Elena, sin imaginar que esos síntomas serían el preámbulo del diagnóstico que cambió sus hábitos y los de toda la familia.

Fue en un periodo vacacional, por lo que no le extrañó que el pequeño Vic durmiera por largos periodos, y que tomara excesiva agua, atribuyéndolo al calor veraniego.


“Dos días antes se fue a casa de su abuela y ella lo llevó con un pediatra ya que él estaba bajando demasiado peso de un día para otro, la doctora le dio pase para análisis, pero esa noche Víctor tenía mucha sed y se tomó una soda en la madrugada y le dolió la panza tanto que empezó a llorar demasiado. Tanto que mi mamá y mis hermanos se lo llevaron de urgencias al hospital eran las 5:00 de la mañana. Llegó con signos rojos, me explicaron que lo primero que le hicieron fue hacerle un control de glucosa y ya marcaban los 700”, narró María Elena.

Posteriormente, entró a terapia intensiva y fue diagnosticado ahí con diabetes mellitus tipo 1, con cetoacidosis. Víctor había bajado de peso 8 kilogramos o más en tan solo dos días. Permaneció internado tres días en terapia intensiva y de ahí a piso en lo que le encontraban o medían con mayor precisión la dosis para recetarle insulina y darlo de alta para poder salir a casa.

“Es un golpe muy duro que no me imaginaba que iba a pasar de la noche a la mañana. Pensaba por los síntomas que era una deshidratación, ya que no estaba informada que así también se podía diagnosticar en niños además de ciertos síntomas, pues se parecen a los síntomas de deshidratación, a dos semanas de salir del hospital nos recomendaron la asociación Akam Sura y estaba próximo su campamento. Para nosotros fue una bendición, ya que Víctor aún no entendía mucho su enfermedad ya que en ese momento todo mundo le decía ‘No comas esto’, ‘no hagas esto’, ‘Víctor inyéctate’, y pues de la noche a la mañana es muy difícil, pero cuando fue al campamento su vida cambió llegó contento, vio que otros niños estaban en su misma condición, vio cómo se inyectaban y eso le ayudó a él mucho”, compartió.

Desde su diagnóstico ha pasado un año y tres meses, y ahora Víctor es un niño muy valiente, pues se inyecta de 4-5 veces diarias y se revisa la glucosa seis o más veces.

“Maduró pronto y entendió su enfermedad, sus compañeros en la escuela le ayudan mucho y ya saben qué debe o no comer, su profesor le permite checarse si se siente mal y está atento y hay bastante comunicación para su mejoría, en la familia cambiaron nuestros hábitos alimenticios y familia externa cuando hay reuniones trata de adaptarse a él para ser todos uno solo”, finalizó.

Te recomendamos:

Finanzas

Reúne Conferencia Internacional de Minería a más de 200 expositores

La XIV Conferencia Internacional de Minería Chihuahua y Expomin se llevará a cabo hasta el 26 de abril

Cuauhtémoc

Denuncia alcalde de Cusihuiriachi amenazas en su contra

Luego de que señalará diversas irregularidades de la pasada administración

Juárez

Patrulla Fronteriza procesa migrantes que burlan la seguridad de GN de Texas en BSI 40 (VIDEO)

En este momento, los migrantes que tienen días pernoctando allí, agarraron sus pertenencias y comenzaron a caminar unos rumbo al oriente y otros de regreso a BSI 36

Chihuahua

Multarán a quien coloque publicidad y propaganda en mobiliario público

La multa económica se calculará por el valor de 60 UMAS, equivalente a 6 mil 514.20 pesos, por el número de días que estuvo colocada, por el número de carteles o pendones que se colocaron

Parral

Intensifican estrategias para el combate a la desnutrición en la Sierra Tarahumara

En Balleza y Guadalupe y Calvo, la SDHyBC capacitó a 67 asistentes sociales para detectar casos de este grave problema de salud pública en niñas y niños de entre cero a cinco años de edad