José Noriel P.G., conocido como el Chueco, mantiene por lo menos cuatro órdenes de aprehensión en su contra por diferentes delitos relacionados con el crimen organizado, en el que se destaca la muerte del estadounidense Patrick Braxton-Andrew, y la reciente muerte de Cruz Soto, a quien le alquilaba terrenos para la cosecha de droga en Guazapares.
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Dentro de las líneas de investigación de la Fiscalía General del Estado se estableció que el Chueco es un líder criminal que opera para el denominado Cártel de Sinaloa en la zona de la Sierra Tarahumara, principalmente en el municipio de Urique, pero su zona de operación se expande por varias comunidades y brechas de esta zona.
En noviembre de 2018 el Chueco se convirtió en el principal objetivo para el gobierno de Javier Corral, luego de que fuera encontrado sin vida el profesor de Carolina del Norte, quien se encontraba turisteando en diversos puntos de Urique, pero que el grupo delincuencial pensó que se trataba de un agente de la DEA.
Noriel P.G. ingresó al Cártel de Sinaloa para operar con el grupo de Los Salazar, que es una familia que mantiene el control del crimen organizado en lo que se conoce como el “triángulo dorado”, que comprende los estados de Sinaloa, Chihuahua y Durango, con la producción, tráfico y demás actividades ilegales que suman grandes cantidades de dinero a los criminales.
Días antes de que la Fiscalía General del Estado encontrara el cuerpo del norteamericano Patrick, un hombre identificado como Mario M.V. acudió a la comandancia del municipio de Guazapares para decir que él era el responsable de haber asesinado a Patrick Braxton, con el objetivo de que cesara la búsqueda en contra del Chueco.
A partir del mes de noviembre y hasta los meses de enero y marzo, Noriel P.G. tuvo que abandonar Urique y en cambio se estuvo movilizando por otras comunidades e incluso llegaron a detectar su presencia en Sinaloa, toda vez que el gobierno de Chihuahua ya le seguía las pistas para ser arrestado por el homicidio del turista.
Entre los informes que se generaron a raíz de la muerte de Patrick, se logró establecer que el Chueco es integrante de la banda criminal que se encuentra ligada con la alcaldesa de Urique, Mayra de Jesús Díaz Gutiérrez, de quien su hermano Pedro D.G. dirige en esa zona del estado en coordinación con Noriel.
La última acusación que le hizo la Fiscalía General del Estado al Chueco fue el asesinato de Cruz Soto Caraveo, un habitante de la comunidad de Monterde en el municipio de Guazapares, que se hizo pasar por activista y derechohumanista para acceder a la protección del Estado.
Sin embargo, en los informes concentrados por la propia autoridad, Cruz Soto había hecho negocios con Noriel el Chueco, a quien le rentó unas hectáreas para que pudiera producir amapola y marihuana, pero que luego de unos conflictos decidió terminar la relación y lo denunció al Ejército.
Desde entonces y hasta el 19 de octubre, se mantuvo una discusión entre ambos personajes, hasta que Cruz Soto decidió volver a la sierra y el grupo fue por él para que pagara por la traición al grupo criminal.
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