El diplomático Ken Salazar, embajador de Estados Unidos de Norteamérica en México elevó una plegaria por el eterno descanso de los sacerdotes jesuitas Joaquín y Javier, asesinados en la Sierra de Chihuahua.
El diplomático norteamericano acudió a las instalaciones de la Insigne y Nacional Santa María de Guadalupe para participar en la oración por los jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora.
Elevaron una plegaria para que sus muertes no sean en vano en la búsqueda de seguridad para la gente de ambos países.
En días previos el embajador había posteado a través de sus redes que la trágica muerte de los sacerdotes jesuitas es un claro llamado a la acción para garantizar en una democracia libre de miedo.
Sus publicaciones han generado reacciones adversas y han comentado estar de acuerdo en su señalamiento pero le hacen un llamado a respetar la democracia, pero también a respetar la soberanía de otros países.
Hay incluso quienes señalaron que también debería orar por las víctimas de su país, quienes en los tiroteos han perdido la vida.
La Compañía de Jesús en México retwitteo la publicación del diplomático.