La joven Lluvia Esmeralda Quiroz Terrazas, quien fue defraudada por Aras y perdió un millón de pesos, falleció sin recuperar su dinero y sin la atención médica necesaria para su diagnóstico de cáncer. Recursos que pudo haber usado para su tratamiento de quimioterapia.
Otilia Quiroz Terrazas, madre de Lluvia previamente denunció que durante un mes lucharon para que fuera atendida en el Instituto Mexicano del Seguro Social, en la Clínica Número 11 en Delicias donde solo le daban paracetamol.
La Asociación Amigos Unidos fueron quienes dieron a conocer el caso, dado que se pretendía recabar 200 mil pesos para trasladar a Lluvia a un nosocomio privado, donde para el ingreso solicitaban 100 mil pesos y 100 mil pesos para el primer ciclo de quimioterapia.
La madre destacó que no quisieron apoyarla, prácticamente la dejaron morir. Lluvia dejó en orfandad a dos niñas de 2 y 7 años.
La historia de Lluvia estuvo plagada de dolor, hace 15 días, la enviaron a Chihuahua a fin de que pudiera iniciar con tratamiento, sin embargo la regresaron a Delicias con el argumento de que no había camas disponibles para su atención.
Del medicamento les dijeron que tampoco había, por lo que la familia tuvo que adquirirlo. Ante la precaria atención decidieron entrevistarse con los directivos en Chihuahua a fin de que le dieran la quimioterapia, pero no recibieron respuesta.
El hematólogo de la clínica les pidió una estudio que tuvieron que costear de manera particular, luego les pidió otro para determinar qué tipo de leucemia era la que la afectaba.
El estado de salud de la joven se fue deteriorando, le detectaron agua en los pulmones y por ello pretendían enviarla de nuevo al Hospital General Regional Número 1 “Morelos” en Chihuahua.
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El dolor de Lluvia ya era insoportable y solo le recetaron paracetamol a pesar de que ya le costaba trabajo respirar. Debido a lo anterior Lluvia falleció el día martes.
Esta joven al igual que cientos de residentes en el estado son víctimas de la financiera Aras, caso que se ventila en los juzgados y que el avance es muy leve.