“Si vivimos en el amor, viviremos unidos, porque es el amor que nos tengamos los unos a los otros”, manifestó don Constancio Miranda Weckmann, arzobispo de Chihuahua quien afirmó que la Santísima Trinidad que es un solo Dios por amor crea, por amor salva y por amor santifica.
Lo anterior al presidir la celebración dominical en la Solemnidad de la Santísima Trinidad: padre, hijo y espíritu santo, un Dios que se revela en tres personas y es cercano a los creyentes.
“Es un Dios que se revela como padre creador, hijo salvador y espíritu santo santificador”, dijo el jerarca de la iglesia católica al recordarles a los fieles que esta fiesta conmemora a tres personas distintas que están unidas por el amor.
En la homilía el arzobispo resaltó que el evangelio habla de Dios Padre que ha enviado a Jesús, este Dios es la fuente de vida y que cuida amorosamente de sus hijos.
Habla de Jesucristo, hijo de Dios, aquel que mostró en su caminar en la tierra que es Dios y que dijo que nosotros también somos hijos de Dios, a la vez que invita a luchar por su reino. Y habló del Espíritu Santo que habita en cada uno e ilumina con su versada y transforma con su amor.
“Queridos hermanos vivir en comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo es creer en la Santísima Trinidad y en un Dios dinámico: un padre que ama y nos envía a su hijo, el hijo que habla del padre y va hacia el padre para salvarnos, y el espíritu que nos comunica al padre y al hijo en ese amor, acción salvadora de Dios”.
Este domingo, en la oración comunitaria se pidió por la iglesia, por los monasterios de vida contemplativa, por los cristianos y cristianas perseguidos, por aquellos que no tienen lo necesario para vivir, por quienes se reunieron a celebrar la eucarística, así como a las hermanas de la congregación de la Santísima Trinidad para que sigan sirviendo a Dios.
Por su parte, el presbítero Gustavo Sánchez Prieto señaló que es revelación de Cristo, es un Dios de la comunión eterna, llamados a vivir en la comunión de la familia humana, iglesia y la eucaristía.
La comunión trinitaria es fuente y modelo de la comunión a la que estamos llamados. “Oremos por la paz para que podemos ser signos de unión en un mundo violento y dividido, que podamos ser signos de comunión en la caridad con todos y que Dios bendiga a Chihuahua con la lluvia”.