El estado de Chihuahua aún no está listo para dejar el uso de cubrebocas, toda vez que los indicadores que miden la intensidad de contagios por Covid-19 muestran que debe disminuirse aún más, y llegado el momento deberá hacerse de manera gradual y diferenciada, de acuerdo a estudios y características de cada espacio, coincidieron profesionales de la salud
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El director de la Facultad de Medicina y neumólogo pediatra, Luis Carlos Hinojos, señaló que en este momento es prematuro pensar en dejar de utilizar lo que ha sido una herramienta básica para evitar contagios no sólo por el virus SARS-CoV2, sino de otras enfermedades respiratorias.
Indicó que esta cultura debería quedarse en los hábitos de la población, además de que consideró que dadas las circunstancias que enfrentan otros países, en México y Chihuahua se debe estar alerta por si se presenta un nuevo repunte.
Por su parte, el doctor Roberto López Segura, especialista en gerencia en la salud y miembro del Colegio de Médicos de Chihuahua A.C,, informó que es necesario que se elabore una matriz de riesgos para determinar cuál es la amenaza que existe en Chihuahua respecto al Covid-19, y si hay posibilidad de un nuevo repunte, elementos con los que las autoridades de salud determinarán qué sigue para el estado.
A su vez la doctora Teresa Ramírez, integrante del Programa Covid-19 Tec Salud, destacó que aunque la cuarta ola registra una disminución en las últimas semanas, no es sinónimo de dejar de lado medidas básicas de prevención.
Indicó que a lo largo de la pandemia muchas personas han visto el uso de cubrebocas como una medida difícil de acatar, debido a que los seres humanos “estamos obligados” a querer tener la vida de antes y tal vez eso ya no vaya a ocurrir.
Para el director de Medicina, Dr. Luis Carlos Hinojos, el paso de quitar el cubrebocas deberá hacerse primero en espacios abiertos y posteriormente en lugares cerrados, y expuso que “hay que recordar que en otras partes del mundo hay rebrotes, entonces no podemos bajar la guardia”.
“Lo que estamos buscando, lo que los epidemiólogos están buscando es disminuir la cadena de transmisión del virus, que son indicadores objetivos”, apuntó.
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“Ahora vemos que en culturas orientales se tiene muy arraigado el uso de cubrebocas cuando alguien está resfriado, y cómo es posible que antes de la pandemia en México se anduviera tosiendo en las calles sin siquiera cubrirse, por educación a lo demás, cuando se esté resfriado pero se pueda salir de casa, debe usarse cubrebocas para no contagiar a los demás”.
El doctor Roberto López Segura agregó que si bien las incidencias están bajas respecto a meses anteriores, deben revisarse aspectos como el que los niños que cursan educación básica hayan regresado a clases presenciales, pues aún no están vacunados.
“Nosotros tenemos la responsabilidad de llevar a cabo esa matriz de riesgos y esperar resultados, de lo que se está dando ahorita en relación de la movilidad, además del beneficio y costo que ha dado la vacunación y finalmente hacer una evaluación para ver si la matriz de riesgos permite a su vez, saber qué impacto negativo puede tener el quitar el uso de cubrebocas”.
