Ante las altas temperaturas y la humedad en el ambiente se incrementa el riesgo de las enfermedades gastrointestinales con la descomposición de alimentos.
Ante ello es necesario extremar precauciones a la hora de preparar, cocinar y almacenar los alimentos como una manera de cuidar la salud.
La gastroenteritis aguda es la infección del aparato digestivo más frecuente, y también afecta a los niños. Su propio nombre indica que el cuadro clínico está marcado por la inflamación, y que los tramos principalmente afectados son el estómago (gastro) y el intestino (enteritis).
Puede ser ocasionada por una amplia variedad de microorganismos desde virus pasando por bacterias o parásitos. Puede presentar fiebre, dolor abdominal. Vómitos t emisión de heces diarreicas.
Entre las recomendaciones está que al ir de compras se verifique que los productos perecederos como es pescado, huevo, leche, lácteos y productos congelados conserven su temperatura indicada.
Se debe usar agua potable a la hora de preparar hielos, agua fresca y alimentos crudos. Además utilizar utensilios diferentes, separando alimentos crudos de los cocidos.
Lavarse bien las manos, lavar y desinfectar frutas y verduras, cocinar bien la carne del pollo.
Muy importante es no comer en puestos callejeros que no tengan agua potable o se vea una mala higiene, ya que ello ayudara a su salud.