En respuesta a los señalamientos que la Sindicatura Municipal de Cuauhtémoc hiciera por presuntas irregularidades en el Seccional de Álvaro Obregón (Rubio), por la reincidencia en la compra de útiles escolares sin la respectiva licitación, el actual regidor y expresidente de la citada comunidad, Carlos Chaparro aclaró que no existe dolo en el hecho, el cual se dio para evitar un gasto mayor al erario por la entrega de paquetes escolares.
Refirió que al estar en dos periodos como Auxiliar Administrativo en Rubio, es decir, en un periodo de seis años, se llevó por lo menos en cinco ocasiones el mismo proceso, el cual surgió por la necesidad de evitar el aumento gradual de los precios en útiles escolares que se adquieren cada inicio del ciclo escolar.
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Dijo que en todo momento se busca la mejor opción en calidad y precio para un mejor control del gasto, optando por aquel proveedor que ofrece lo requerido por la autoridad seccional, sin embargo, se establece determinado tiempo para hacer la compra o de lo contrario, el precio aumenta de manera considerable por la demanda de los materiales al iniciar el ciclo escolar.
Con lo anterior, Carlos Chaparro demostró que sí se llevó a cabo la licitación al momento de buscar, tanto en Cuauhtémoc como en otros puntos del estado, las mejores opciones, acción que en todo momento se les informó a los regidores que representan al Seccional, mostrándose sorprendido de los señalamientos por anomalías en Rubio.
El regidor indicó haber recibido una observación por parte de la anterior Sindicatura sobre las fallas en la forma de adquirir los paquetes escolares, acatando las instrucciones para evitar errores en el futuro, sin embargo, en ningún momento se le observaron los mismos trámites de tres años de ciclos escolares antes en los que la compra de hizo de la misma manera.
Reiteró que en el presente año se adquirió con el mismo proveedor del ciclo 2023-2024 al ser la mejor opción que se encontró, afirmando desconocer a los representantes del negocio que ofrece el servicio, esto, para evitar hipótesis de tratar de beneficiar a personas allegadas a él para su beneficio económico.
“No nada más son dos años, hemos comprado por cinco años útiles escolares, porque el primer año se entregaron útiles escolares a una parte de las escuelas, pero los otros tres años se hizo entrega a la totalidad de las escuelas desde preescolar, primaria, secundaria, preparatoria e incluso universidad como a los maestros también”, explicó Carlos Chaparro.
Finalmente, dijo estar en la mejor disposición de hacer las respectivas aclaraciones, además de estar de acuerdo en que sea el Órgano Interno de Control quien realice las indagatorias para determinar la gravedad de los señalamientos, insistiendo en que no hubo dolo en la compra de útiles escolares como se llevó a cabo en el periodo de cinco años.
