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Luego del conflicto que se generó por la llamada defensa del agua en la zona centro sur del estado de Chihuahua, que derivó en la detención de 10 personas y la muerte de Jessica Silva y las lesiones de su esposo, Jaime Torres, quienes fueron baleados por un grupo de elementos de la Guardia Nacional, se conmemora un año luctuoso de la víctima.
Este próximo 8 de septiembre, en las instalaciones de La Boquilla, donde se registraron varios enfrentamientos entre manifestantes y personal de la Guardia Nacional, se llevará a cabo un evento para recordar la memoria de Jessica Silva y pedir por la liberación de los cuatro campesinos detenidos.
El recuento de los hechos inicia cuando Rosendo Lerma Lechuga, Juan Lechuga Montes y Juan Rivera Márquez se encontraban en las manifestaciones en septiembre de 2020, quienes fueron sorprendidos por elementos de la Guardia Nacional con latas de gas lacrimógeno, por lo que fueron arrestados.
Por la noche los trasladaron a la ciudad de Delicias, donde en una primera versión el titular de la Guardia Nacional dijo que se trataba de tres delincuentes, a quienes pretendieron rescatar y por lo cual se generó un enfrentamiento armado, lo cual fue desmentido meses después de una investigación sobre el caso.
Los tres prisioneros eran trasladados a la ciudad de Delicias para que fueran puestos a disposición, sin embargo, al notar la presencia de Jaime Torres y su esposa Jessica Silva, fue que les empezaron a disparar en repetidas ocasiones, lo que generó que la mujer muriera en el lugar y él resultara gravemente lesionado.
La versión de los guardianes nacionales fue que ellos repelieron la agresión en contra de un grupo criminal, sin embargo, tiempo después la Fiscalía General del Estado descartó esta versión y negó que esta pareja portara o hubiera accionado un arma de fuego el día de los hechos que murió Jessica Silva.
Por parte de los tres agricultores detenidos, al momento siguen en prisión por haber sido acusados de portar latas de gas lacrimógeno y equipo de la Guardia Nacional, por lo que un juez federal dictó la vinculación a proceso y por el momento siguen detenidos en el Cereso número 1 de Aquiles Serdán.
El 27 de octubre de 2020, la propia Fiscalía General de la República informó que por estos hechos detuvieron a seis elementos de la Guardia Nacional, que fueron puestos a disposición por los delitos contra la administración de justicia, homicidio calificado, tentativa de homicidio, por lo cual permanecen en una prisión militar en el estado de Sinaloa.
A pesar de estos hechos, meses después el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que todo el conflicto por el agua era un asunto político, incluso exhibió involucrados del grupos del crimen organizado, los cuales mostró a través de una supuesta red de vínculos entre los campesinos, políticos, empresarios y campesinos, quienes acaparan las principales concesiones del agua.
Asimismo, meses después de que ocurrieron los hechos en La Boquilla, en una de las conferencias de prensa el presidente Andrés Manuel, seguró que en ese movimiento se habían robado decenas de armas de fuego, cartuchos y equipo táctico, los cuales fueron tomados por gente del Cártel de Jalisco Nueva Generación, ya que esas mismas armas habían aparecido en el estado de Nayarit.
La última detención se registró el pasado 22 de julio, cuando agentes de la Fiscalía General de la República y de la Guardia Nacional acudieron al domicilio de Andrés Valles para arrestarlo por presuntos daños que generó a vehículos y propiedades de la federación.
