De setecientas a mil hectáreas podría crecer la superficie agrícola en el ejido Naica, donde los productores de alfalfa se benefician de la extracción de agua de la mina para el riego de sus cultivos, lo cual genera expectativas de reactivación económica en la zona.
Aidé López de Anda, la presidente municipal de Saucillo, recordó que en las últimas negociaciones firmadas en los convenios entre el ejido y la empresa minera, se consideraba la extracción de agua de la mina para el riego de una superficie inicial de 700 hectáreas.
Sin embargo, informó que durante la última visita de Mario Vázquez Robles, Secretario de Comunicaciones y Obras Públicas del Gobierno del Estado, al municipio de Saucillo, una comisión de ejidatarios de Naica solicitó maquinaria al funcionario, con la finalidad de abrir más tierras al cultivo.
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La alcaldesa mencionó que los ejidatarios proyectan abrir hasta 300 hectáreas más, que sumadas a las ya existentes representarían mil hectáreas, lo que representaría un incremento en la producción agrícola.
Aidé López resaltó que este empuje de los ejidatarios está haciendo renacer al pueblo de Naica, deprimido económicamente a raíz del cierre de la mina por una inundación en el año 2015.
“Ya llegamos al seccional de Naica, ya vemos los sembradíos, los caminos verdes; ya vemos que están los agricultores cosechando… prácticamente la siembra ha sido alfalfa y de esto se deriva también que se incremente la actividad pecuaria”, expresó optimista la alcaldesa saucillense.
Se espera que la actividad agrícola en las tierras del ejido ayude a reanimar la economía de Naica, que hasta hace poco más de ocho años dependía en gran parte de la minería.
La situación orilló a numerosos habitantes del seccional a buscar trabajo en otros minerales o en empresas asentadas en Delicias, Camargo y la ciudad de Chihuahua, generando una reducción en el número de habitantes del pueblo.