DELICIAS.- Agotados sus ahorros y agobiados por las deudas, propietarios de gimnasios en este municipio clamaron por ayuda a las autoridades estatales para que les permitan reabrir sus negocios, los cuales -aseguran-, se encuentran a punto de colapsar económicamente después de permanecer dos meses cerrados.
Después que Protección Civil realizara un operativo la semana pasada durante el cual detectó que tres gimnasios estaban abiertos y obligara a sus propietarios a cerrarlos nuevamente, un grupo de empresarios de este ramo se reunió para analizar la situación y concluyeron que es urgente la reapertura, pues a la mayoría se les agotaron sus recursos.
La señora Karla Ortiz, quien habló en representación de todos los dueños de gimnasios en entrevista para el noticiero de Panorama Informativo, expuso que necesitan reabrir sus establecimientos y se quejó de que las autoridades los ponen en el mismo nivel que los bares y cantinas.
Señaló que los gimnasios contribuyen a disminuir los casos de enfermedades como la diabetes y obesidad. “Nosotros somos medicina a corto y a largo plazo”, afirmó la mujer, quien dijo que los pabellones, lejos de ser focos de infección son sitios a los que asiste gente sana.
La entrevistada manifestó que los propietarios de los locales están dispuestos a acatar las medidas de higiene necesarias con tal que les permitan reabrir, incluso a permitir el ingreso de sólo cinco personas por hora para mantener la sana distancia.
“Hay maneras de que nos dejen trabajar y que empecemos a producir de nuevo porque tenemos tres meses con nuestros negocios cerrados”, expresó Karla Ortiz.
Recordó que en los gimnasios no se forman filas largas, como sucede afuera de las tiendas de conveniencia y expendios de cervezas, que el fin de semana lucieron abarrotados de personas buscando abastecerse de embriagantes, ante la mirada tolerante de las autoridades.
Alertó que los establecimientos donde se practica el ejercicio están cerca de colapsar económicamente, pues ya pasaron varias semanas desde el cierre obligado y los ahorros se terminaron. En cambio han aumentado las deudas por la renta, luz y otros servicios, así como gastos personales de cada empresario.
Por este motivo reiteró el llamado de auxilio a las autoridades para que los dejen trabajar, solicitando una cita con la instancia que corresponda para ponerse de acuerdo en cómo podrían reabrirse los gimnasios.
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