DELICIAS.- Sin asuntos legales que llevar por el cierre de los tribunales, la economía de los abogados se desplomó al igual que la de otros prestadores de servicios tras implementarse las medidas preventivas por la pandemia del Covid-19.
Así lo reconoció Javier Robledo Zúñiga, presidente de la Federación Estatal de Colegios de Abogados, quien señaló que los jurisprudentes organizados de la entidad analizan la manera de reactivar, aunque sea en forma parcial, su labor en los juzgados.
Dijo que el problema es grande como en otros sectores productivos y se busca que los abogados tengan ingresos para que puedan hacer frente a sus compromisos.
Enfatizó que la situación es grave porque prácticamente no hay trabajo para los profesionistas en Derecho. Únicamente -expuso-, están abiertos los juzgados penales, pero para atender situaciones urgentes, como formulaciones de imputación y detención, y las vinculaciones a proceso.
Robledo Zúñiga consideró que también deberían ser urgentes las diligencias para liberar o brindar otro beneficio penal a las personas que ya reunieron los requisitos para ello, pero desgraciadamente -lamentó-, solamente los juzgados de control, diferentes a los de ejecución, son los que están trabajando.
En materia familiar -opinó-, lo urgente son la separación de personas y las pensiones alimenticias puesto que se disparó la violencia doméstica. Todo lo demás -recalcó-, está parado y los abogados no pueden realizar su labor.
Señaló que si el magistrado presidente da su visto bueno podrían atenderse algunos asuntos de manera virtual, mientras que para el mes de junio podrían reanudarse las actividades en los juzgados, pero con medidas preventivas como la sana distancia y el uso de cubrebocas y gel.
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