Es inminente el aumento del precio del kilo de tortilla quizá para la próxima semana, ya que en los expendios de la ciudad coinciden en que será inevitable subir el costo, el gobierno exige no hacerlo pero no hace nada para evitar los aumentos de los insumos primarios y materias primas utilizadas para esta industria.
El precio que predomina es de 15 pesos el kilogramo, sin embargo hay algunas tortillerías que las tienen en 12 pesos. Encargadas de tortillerías en la zona centro de la ciudad, coincidieron en que si bien es cierto no se ha subido el precio, están a la expectativa sus patrones (dueños) por tomar la decisión según lo que salga de parte de los dirigentes a nivel nacional de la industria de la tortilla, los cuales por cierto ya se manifestaron en la intención de aumentar posiblemente un peso el costo del producto al público.
El gobiernos a través de la Profeco está ordenando que no se den aumentos en este producto alimenticio de la canasta básica mexicana, sin embargo el gobierno no hace por que los costos del gas, gasolinas, harinas y otros insumos no aumenten sus precios, sino por el contrario se están viendo estos incrementos, lo que no deja remedio del sector industrial de agregar estos costos a su proceso y por ende equilibrar sus relaciones producción-ventas.
Los precios más altos de la tortilla están en las tiendas abarroteras que la sobrevenden, así como las que trabajadores a bordo de motocicletas reparten, ello por el costo de los traslados y los pagos a estos mismos empleados, mientras que en los abarrotes por el hecho de que tienen de alguna forma más libertad para imponer ciertos precios de acuerdo a las competencias que tengan en sus sectores, pero la Profeco también debería regular que no se exagere en dichos precios en estas tienditas. Por lo pronto, es inminente que se vaya a incrementar el precio de la tortilla, al menos un peso por kilo, así se percibe en el sentir de esta industria por el efecto de los incrementos a los energéticos.
