Una señora de 76 años de edad sobrevivió al ser atropellada por un autobús de la línea Chihuahuenses, que tras arrastrarla algunos metros la dejó prensada debajo de la suspensión, por lo que voluntarios -entre quienes se encuentra un hombre apodado Piolín- actuaron de inmediato para levantar la pesada unidad con gatos hidráulicos y sacarla con ayuda de los técnicos en Urgencias de la Cruz Roja, apoyados también por agentes de la Policía Municipal y de Vialidad; los hechos ocurrieron a las 12:40 horas de ayer en la avenida González Ortega y calle Jiménez, en el centro de la ciudad.
De acuerdo a lo señalado por testigos, el autobús con número económico 2055 y placas del Estado de México, proveniente de Ciudad Juárez, circulaba por la calle Jiménez cuando la señora Romy -como se le conoce en el centro de la ciudad, a donde acude a diario a vender boletos de Lotería Nacional- cruzó la avenida González Ortega; fue arrollada y el conductor en ningún momento se percató de que la llevaba arrastrando debajo de la suspensión.
Fueron los mismos transeúntes y comerciantes del sector quienes gritaron al conductor que detuviera su marcha porque la señora estaba debajo de la pesada unidad; minutos después el hombre conocido como Piolín inició la labor de rescate con un gato hidráulico que otro conductor le prestó.
A dicha labor se sumaron elementos de la Policía Municipal, entre ellos el comandante operativo Marco Antonio Ortega, quien ya contaba con la ayuda de por lo menos 15 agentes de su departamento y de Vialidad, quienes aseguraron el área para evitar que pasaran más vehículos por el lugar del accidente con el fin de sacar rápido a la señora.
Al lugar acudieron socorristas de la Cruz Roja, quienes ayudaron en el rescate y traslado de la lesionada al Hospital General de esta ciudad; a simple vista se le notaban sólo raspones, pero ella se quejaba fuertemente.
El conductor del autobús fue detenido y llevado a los separos del Complejo de Seguridad Pública Municipal, donde se elaboraron las actas correspondientes para deslindar responsabilidades; los diez pasajeros que iban rumbo a la Ciudad de México debieron transbordar a otro autobús, ya que el vehículo fue asegurado.
Cabe mencionar que el único paso peatonal que existe en dicha esquina es el que se encuentra por la tienda de telas frente al mercado y el que cruza hacia la Botica Central, ya que en las otras dos esquinas -una de las cuales fue usada por la señora para pasar la avenida González Ortega frente a la farmacia- no existe dicho señalamiento vial.