Cinco alumnos del Centro de Atención Múltiple 7009 Juan Jacobo Rousseau recibieron su diploma al graduarse de preescolar, primaria y formación laboral. Carlos es uno de ellos, quien a partir del próximo ciclo se integrará a la Escuela de Artes y Oficios.
Muy emotiva resultó la graduación de los alumnos y alumnas, quienes continuarán su formación, ya que el promedio de asistencia a un CAM es de 15 años, debido a que atienden bebés desde los 45 días de nacidos a fin de que entre más temprano reciban terapias, puedan incorporarse más rápido al entorno educativo.
El pequeño patio de la institución fue el marco para la celebración, donde padres, madres y abuelos se involucran para que las niñas y niños puedan tener una mejor calidad de vida y logren una verdadera inclusión en la sociedad.
En el evento se realizó el cambio de escolta, situación que hizo a muchos padres sentirse orgullosos al ver el avance de sus hijos, así mismo los bailarines del Grupo Jóvenes en Movimiento deleitó a los asistentes con varios números de baile, arrancando aplausos.
“Gracias por mostrar su empeño, dejan enseñanza, experiencia y huella en el corazón”, era parte de la frase que se podía leer en cada uno de los diplomas. El último reconocimiento fue para Carlos, quien egresa del CAM para integrarse a formación para el trabajo.
La madre de Carlos, María Teresa Hernández, presidente de la sociedad de padres, destacó que en los 15 años que su hijo y ella permanecieron en la institución fueron testigos del tesón para conseguir cada espacio, ahora conminó a los padres y madres de familia a no claudicar hasta lograr contar con espacios dignos para sus hijas e hijos. “Este CAM ha sido nuestra casa, no hay palabras para darles las gracias a todas y todos quienes han pasado por nuestras vidas, nos han hecho mejores seres humanos”.
Al final todos se entregaron en el aplauso por su querida institución, para despedirse al grito de: “¡Orgullo Pegaso!”.
Te puede interesar: