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Las actividades de higiene personal son las que más derroche de agua significan, ya que la mayor parte de éstas se realizan con la llave abierta de lavabos, regaderas y fregadores.
Luis Fernando Ramírez, ingeniero Ecología de la Universidad Autónoma de Chihuahua, dijo que 6 de cada 10 habitantes gastan entre 6 y 8 litros de agua, sólo para lavarse las manos; de 5 a 7 litros, en lavarse los dientes, y 8 litros más se gastan al tirar la cadena del inodoro. A lo anterior, se suma un promedio de hasta 200 litros de agua para una ducha de 10 minutos.
“Estamos hablando de que cada habitante llega a gastar el doble o hasta el triple del agua que se necesita para cubrir las necesidades de higiene personal, limpieza de la casa, o preparación de comida, entre otras actividades”, señaló el entrevistado.
El ecologista explicó que Chihuahua es la ciudad con más gasto per cápita de agua, pues diariamente cada persona llega a utilizar hasta 300 litros. “Esta cantidad es excesiva, pues una persona podría fácilmente ahorrar la mitad de litros de agua que utiliza al día, es decir, con 150 litros diarios, o menos, un habitante puede cubrir sus necesidades perfectamente”, señaló.
Incluso, señaló que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 100 litros diarios por persona deberían ser suficientes para satisfacer las necesidades básicas de salud, alimentación e higiene, lo que significa que en la ciudad se gasta hasta el triple de lo establecido por la OMS.
Algunas de las actividades en las que más se gasta el agua son cocinar, jalar la cadena del inodoro, lavar la ropa, el auto y los platos, así como la higiene personal que son lavado de manos, dientes y la ducha, por lo que Ramírez señaló que en estas actividades se puede ahorrar agua considerablemente, únicamente cerrando las llaves mientras se realizan las actividades.
Señaló que casi el 40% del total del agua que se utiliza en un hogar se gasta en el inodoro, a éste le siguen el lavado de ropa, con el 22%; el 23% se utiliza en la ducha y lavado de dientes, y el resto en otras actividades.
“Si mientras nos cepillamos los dientes cerramos el agua, utilizamos apenas medio; mientras que si se deja la llave abierta, se llegan a desperdiciar hasta seis litros de agua, lo que es indudablemente innecesario”, puntualizó. Lo mismo pasa al tomar la ducha o lavarse las manos, ya que si se cierra la llave, el gasto es considerablemente menor.
Aparte de la higiene personal, está el aseo de la casa, “muchas personas conservan la mala costumbre de hace muchos años, cuando se regaban los frentes de las casas o los patios con la manguera, lo que significa un importante gasto del agua”, señaló Luis Fernando Ramírez.
Añadió que el agua es indispensable para el ser humano, y para cualquier ecosistema, por lo que es urgente que se tome conciencia de lo escasa que es, y de esta manera tomar medidas para evitar el gasto innecesario, lo que además conlleva un ahorro económico para las familias.
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