Durante la remodelación del templo de San Lorenzo, ubicado en el municipio de Belisario Domínguez, trabajadores localizaron restos de dos esculturas de lo que parecen dos figuras religiosas, las cuales fueron rescatadas por personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para su conservación.
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Así lo explicó el presidente municipal de Belisario Domínguez, Aarón Loya Jáquez, quien comentó que tras haber iniciado la remodelación del templo de San Lorenzo, y al momento de cambiar el piso del lugar fue que dieron con unas esculturas de madera, las cuales datan de por lo menos 200 años, según algunos estudios que les han practicado.
“Estábamos realizando el cambio del piso, porque tiene por lo menos cuatro capas que se han realizado en diversas épocas, y como estamos haciendo una remodelación a profundidad, fue que dimos con estas esculturas, no sabemos su historia, pero parece que las ocultaron durante la guerra cristera”, refirió.
Estas dos esculturas, comentó, fueron rescatadas por el arqueólogo Alberto Peña Rodríguez y el antropólogo César de la Riva Molina, quienes se hicieron cargo de todos los trabajos de excavación. Aún conservan por lo menos el 70% de su estructura original.
Estaban a una profundidad de dos metros de donde se encontraba localizado el altar, por lo que presumen que se tratara de algún tipo de ocultamiento durante los años 20 o algún tipo de ritual que había aplicado durante aquella época, por lo que buscarán obtener mayor información.
El presidente municipal de Belisario Domínguez anunció que esas dos piezas podrían mostrarse en el templo al interior, siempre y cuando logren recuperarlas de buena forma para exhibirlas en una vitrina de cristal, para que se sumen a los trabajos de remodelación de este espacio que a su vez consideran cultural.
Comentó que este hallazgo se dio el pasado 23 de octubre, por parte de los trabajadores de la remodelación, y a su vez lograron localizar algunos restos óseos, los cuales podrían pertenecer a algún sacerdote que fuera sepultado en esas instalaciones, durante la época de los 20 o 50.
Abundó que el personal del Instituto Nacional de Antropología lleva a cabo la exploración en “cala”, que son hoyos de 45 centímetros de profundidad para verificar que existan o no más vestigios que pudieran estar enterrados, así como posibles restos humanos o esculturas similares.
El alcalde comentó que buscarán la forma de preservar estas esculturas para formar parte del programa de remodelación, ya que se ha trabajado en la rehabilitación de todos los espacios, muros y vigas, ya que no se ha atendido desde hace varios y es un espacio muy visitado por los pobladores.
Dijo que este templo es un espacio reconocido del municipio y que gracias a la gestión del Ayuntamiento se logró la remodelación a través del Fondo de Apoyo a Comunidades para Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos (Foremoba), un programa del gobierno federal.
