El vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, Pbro. Gustavo Sánchez Prieto, emitió un comunicado en el que hace un llamado a continuar observando las normas sanitarias impuestas por la pandemia del Covid-19 y lamentó la enfermedad y la pérdida de la vida de integrantes de la Iglesia Católica, quienes desde su apostolado, brindan sus servicios con fe y caridad.
“A nivel nacional, ha habido obispos, sacerdotes, religiosas, enfermos y defunciones. A nivel local, tanto en el estado, en las distintas diócesis -Juárez, Parral, Nuevo Casas Grandes, Cuauhtémoc, Tarahumara- así como aquí mismo, en la Arquidiócesis de Chihuahua, hemos tenido sacerdotes, ancianos y jóvenes, contagiados, algunos incluso con hospital, otros en cuarentena en la casa parroquial o también con la familia”, mencionó, quien también es rector del Santuario a San Judas Tadeo, en la zona rural del municipio de Chihuahua.
En ese sentido, mencionó a las religiosas, quienes también han enfrentado un panorama similar, y quienes entre sus integrantes, desafortunadamente, también han lamentado defunciones por esa causa.
“En los distintos servicios que prestamos, indudablemente con fe y caridad, estamos llamados a guardar las normas sanitarias, no tanto por salud individual sino por bien de la comunidad entera. Seguimos adelante, con profunda esperanza cristiana, que nos llama a ser testigos del amor de Dios en este tiempo de pandemia”, manifestó.
Así mismo, señaló que la Conferencia Episcopal Mexicana les urge a la cercanía, al servicio humilde, a la esperanza cristiana, atentos siempre a los más golpeados por esta crisis sanitaria que se ha traducido en otras crisis: familiar, económica, laboral, política y hasta eclesial, destacó.
“Con humildad tenemos que reconocer que la pandemia nos ha estrujado a todos, con todo siempre es más grande el amor y la misericordia de Dios”, finalizó el padre Sánchez Prieto.