Habitantes de las colonias ubicadas en la periferia de la ciudad padecen las consecuencias que dejan las fuertes lluvias que se han registrado en los últimos días, pues al vivir en pequeñas casas de madera y lámina, quedan desprotegidos ante las precipitaciones e inundaciones.
En la colonia El Porvenir y sus alrededores, chihuahuenses de escasos recursos habitan pequeños cuartos que fueron construir con madera, laminas, cartón y hule, materiales que brindan poca protección ante las inclemencias del clima, sea calor, frio o lluvias, como en esta última semana.
Al ser zonas que no cuentan con pavimentación en las vías de circulación, durante la temporada de lluvias los sectores se vuelven intransitables ante las lagunas y el lodo que se forman, lo cual termina representando un peligro para los conductores que intentan pasar por el lugar.
Además, la mayoría de los jacales fueron posicionados en las inmediaciones de arroyos o canales, por lo que se corre el riesgo de que sean arrastrados por la corriente formada por las precipitaciones.
Con frecuencia los habitantes se ven en la necesidades de tomar otros caminos, alargando la distancia que los separa de sus destinos, ya sea su lugar de trabajo o el local comercial en el que adquieren alimentos y otros artículos necesarios para el día a día.
Ante la situación que los habitantes de dichas colonias padecen, las autoridades de seguridad y el Heroico Cuerpo de Bomberos ha respondido a llamas de auxilio en la que los habitantes solicitan apoyo para colocar materiales de protección, como hule negro para impedir el paso del agua a los jacales.
Asimismo, las autoridades municipales comenzaron las donaciones de hule para las familias que viven en dichas condiciones, con la finalidad de que pueden resguardarse al interior de las pequeñas viviendas sin correr el riesgo de goteras o derrumbes de techos y paredes al debilitarse por la lluvia.
