Hace unos días, la señora Eréndira Arrieta, madre del jovencito Enrique “Kike” Arrieta, quién fue asesinado por un supuesto Policía Municipal en Los Kilómetros, recalcó la importancia de que se les hicieran exámenes psicológicos a todos los agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, para evitar que sigan ocurriendo este tipo de abusos policíacos.
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Pero, lamentablemente, las súplicas de esta madre de familia no fueron escuchadas por las autoridades y la mañana del martes, una nueva tragedia marcó a los juarenses, luego de que una agente de la SSPM decidiera asesinar a su pareja a balazos, para después herir al hijo de ella y finalmente intentar quitarse la vida de un tiro en la cabeza.
Los hechos ocurrieron en una vivienda de las calles Tepeyac y República de Cuba, de la colonia Hidalgo, hasta donde arribaron los cuerpos de rescate y agentes de la Policía Municipal, quienes ayudaron a su compañera para que fuera llevada en código rojo a recibir atención médica, junto con el menor.
Extraoficialmente se identificó a la oficial con el nombre de Nubia Pérez, quien al parecer cometió este crimen en un supuesto arranque de celos, aunque la SSPM ha intentado manejar de manera muy hermética la información.
En un principio se dijo que estas tres personas habían sido víctimas del crimen organizado, sin embargo, al arribar personal de la Fiscalía de Género, determinaron que todo se debió a un homicidio-suicidio y que los disparos los realizó la uniformada con su arma de cargo.
Hasta el mediodía del martes se dijo que tanto la uniformada como el menor de 11 años seguían graves en el área de urgencias de un hospital, aunque también se mencionó que los dos habían fallecido por las heridas de bala.
De manera extraoficial se manejó la versión de que la pareja asesinada también era uniformada, pero la SSPM no ha confirmado ni negado está información por el momento.
