“La línea es que no hay línea”, dijo Renato Alarcón delegado especial del Comité Nacional del PRI en Chihuahua, al comprometerse a establecer un escenario de pluralidad e imparcialidad en el espectro estatal ante la diversidad de priistas que se han manifestado en apoyar a diferentes perfiles que han levantado la mano para dirigir el priismo nacional.
“En las últimas semanas, desde que he tenido la responsabilidad en Chihuahua, hemos tratado de construir una ruta que nos permita la interlocución entre las diferentes expresiones y corrientes, que son sumamente robustas en el Estado”, dijo.
Ratificó que a quienes han manifestado su intención, el partido tendrá que garantizarle reglas claras y sobre todo un “piso parejo”, para que quienes aspiren lo hagan en igualdad de circunstancias.
A los dirigentes y militantes del partido, les pidió “mantener abiertos los canales de comunicación, para que en el caso de que hubiese una duda, se platique abiertamente con el fin de fortalecernos con el diálogo interno”, lo anterior en respuesta a lo dicho ayer por Ulises Ruiz, exgobernador de Oaxaca quien anunció denuncias penales contra militantes ante la FEPADE, por el uso de estructuras y recursos del tricolor para promocionar aspirantes al CEN nacional.
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