En el estado de Chihuahua un total de 802 personas han muerto por infarto durante los primeros cinco meses del presente año, que promedia alrededor de tres muertes por día a consecuencia de este padecimiento que se detona por diferentes factores genéticos, enfermedades, malos hábitos alimenticios y vicios o adicciones.
Según los datos obtenidos por la Secretaría de Salud, en el estado se han contabilizados por lo menos 802 infartos en estos primeros meses del año, que se clasifican en cuatro tipos diferentes, donde el más común es el de isquémicas del corazón, que es infarto fulminante o infarto al miocardio, que contempló 562 casos.
En tanto a lo que respecta al año 2018, la Secretaría de Salud registró un total de 4 mil 914 infartos de diversos tipos en el estado de Chihuahua, de los cuales 3 mil 212 de ellos fueron muertes al corazón, lo que deja un promedio de decesos de ocho a nueve por día en todo el territorio estatal.
Hasta el momento el principal motivo que está terminando con la vida de las personas en el estado de Chihuahua son los infartos al corazón, ya que en lo que va del año se han registrado por lo menos 802 casos, mientras que las cifras relacionadas con muertes del crimen organizado o narcotráfico rondan los 780 eventos.
En los últimos dos días, dos personas murieron a consecuencia de un infarto al corazón, siendo el primero de ellos un adulto que se encontraba recorriendo un tianguis en la avenida Equus, donde se desvaneció y perdió la vida, según relataron testigos y personas que llegaron.
Posteriormente una mujer que estaba en Plaza La Sierra murió cuando se encontraba realizando compras dentro del establecimiento, por lo que se solicitó la presencia de paramédicos, quienes intentaron atenderla, sin embargo ya no contaba con signos vitales y se determinó que había muerto en el lugar.
El doctor Óscar Murillo Aldaco, del Programa de Salud del Adulto y Adulto Mayor, comentó que una mala alimentación, malos hábitos, no practicar ejercicio, padecer diabetes o hipertensión, fumar o consumir bebidas embriagantes, son los principales detonantes para que se genere un infarto al corazón.
Aseguró que las personas diabéticas o hipertensas son las que se encuentran con mayor riesgo de padecer un infarto, ya que si combinan su padecimiento con malos hábitos o cualquiera de los antes mencionados, existe un 50% más de riesgo a que las personas tengan un infarto por el estado de salud que mantienen.
Comentó que la prevención y el cuidado son los principales factores para evitar un infarto de cualquier tipo, ya que si una persona hace 20 o 30 minutos de ejercicio diario o consume buenos alimentos basados en frutas y verduras, disminuirá su posibilidad de padecer algún infarto durante su vida.
Informó que la mala alimentación y demás hábitos malos generan la obstrucción de los tejidos que forman un órgano, o una parte de él, debido a la interrupción del riego sanguíneo de la arteria o las arterias correspondientes, que finalmente conduce a la muerte de una persona, ya que el corazón no recibe la suficiente sangre para seguir trabajando en el organismo.
Los principales síntomas son dolor muy fuerte y opresión en el pecho, que puede aparecer de forma brusca o durante el ejercicio, puede acompañarse de dolor en otras partes del cuerpo: mandíbula, cuello, espalda, brazo izquierdo, zona abdominal, el dolor no desaparece en reposo, ni varía con movimientos ni con la respiración.
Y en otro de los síntomas, existe mareo intenso, sudor, cansancio inexplicable, latidos anormales del corazón, dificultad para respirar, náuseas y vómitos y este padecimiento puede durar hasta 20 minutos consecutivos.
A nivel nacional, se dice que los mexicanos se infartan en promedio a los 60 años, independientemente del síndrome coronario, del total, 80 por ciento son hombres, de ellos, 50 por ciento padece hipertensión, entre 45 y 46 por ciento son diabéticos, 50 por ciento tiene antecedentes de tabaquismo y entre 30 y 40 por ciento padece dislipidemia.
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