El parque metropolitano El Reliz registra una gran cantidad de personas sin cubrebocas y olvidándose de que existe una pandemia en proceso que a la fecha ha cobrado la vida de 901 personas.
Niños, jóvenes, adultos y adultos muy mayores acuden por igual, hartos del encierro y ansiosos de salir, quienes se exponen a un contagio masivo, ya que muchas personas no usan cubrebocas sobre todo al caminar y correr, cuando la respiración y la exhalación se incrementa, dando paso a una mayor dispersión de gotas de saliva.
La inconsciencia se percibe, son pocos los que usan el “cubre”, en un recorrido por el sector se aprecia que de 15 personas sólo dos usan la mascarilla, cuando en el estado se supone que es obligatorio, más cuando se tienen contacto cercano con la gente.
El guardia del parque relató que empiezan a recibir personas desde las 5:00 horas y cierran a las 22:30 horas, pero hay quienes se rehúsan a irse, por lo que tienen que pedir el apoyo de la Policía Municipal para retirarlos de la zona.
La aglomeración se palpa desde el estacionamiento, pues además de las filas laterales se forman dos más en el centro de la calle, se estacionan donde pueden y como pueden.
La vigilancia por parte de la autoridad municipal se ha relajado, ya sólo deambulan por el estacionamiento, pero su presencia no inhibe a los asistentes, quienes han relajado por completo las medidas preventivas, como es la sana distancia y el uso de cubrebocas.
Una persona que no usa cubrebocas y es contagiada por el virus, y además transita como asintomática, tiene 14 días para esparcir el virus, se calcula que alrededor de 33 personas puede contagiar, lo que se va multiplicando.
El doctor Gumaro Barrios Gallegos, subdirector de Epidemiología de la Secretaría de Salud, hizo énfasis en que las medidas preventivas son responsabilidad de todos y de esa forma es como todos los ciudadanos podrán salir adelante.
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