Al celebrarse este 21 de enero el Día Mundial de la Ardilla, maestros responsables del área de conservación biológica de la Facultad de Zootecnia y Ecología de la Universidad Autónoma de Chihuahua, hacen un llamado a la población para conservar esta especie que se observa en el Campus 1 y en las instalaciones de la Ciudad Deportiva.
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En el mundo existen un aproximado de 300 especies de ardillas; de las cuales se tienen identificadas diez tipos en la entidad, dos de ellas que se asegura son endémicas de México y están localizadas en los estados de Chihuahua y Durango.
Para el Ingeniero Jesús Fernández Fernández, maestro investigador de la Facultad de Zootecnia, este día es un peculiar festejo que invita a reflexionar sobre las medidas de protección de este roedor cuya existencia es de gran importancia para el cuidado adecuado del ecosistema del Campus 1 de la UACH y de la Ciudad Deportiva, dos de los principales pulmones de la localidad.
“Las ardillas pertenecen a una familia a la que se le denomina “Sciuridae” se pueden encontrar en los diferentes ambientes de la entidad, sin embargo, las más constantes son las ardillas arbóreas, conocidas por vivir en los árboles, y las terrestres que habitan los desiertos; otra es la que se le conoce como perrito de la pradera y, por último, la ardilla voladora que sobrevive al clima de la Sierra Madre Occidental”.
El investigador UACH explicó que a estos animales se les considera como seres importantes para el ecosistema, porque son herbívoros y son las encargadas de pelar la cáscara y dispersar las semillas después de caer en los árboles para facilitar la germinación, actividad que se puede apreciar en el Campus 1.
Fernández explicó que, en el caso de los ardillones, perros de la pradera o bien las ardillas voladoras que habitan en otras regiones de la entidad, su importancia radica en el papel dentro de la cadena alimenticia, donde animales como coyotes, pumas, zorras, jaguares y osos se alimentan de ellos.
El investigador aseguró que dentro del Modelo Educativo Renovación UACH-DS, en la Universidad y en lo personal, ha trabajado en proyectos de investigación relacionados a la evolución de las ardillas, sin embargo, se busca implementar otra investigación en la Sierra Madre Occidental para conocer cómo se desenvuelven las ardillas voladoras que habitan en arboles viejos y grandes.
Por lo anterior, este y todos los días se recomienda a la ciudadanía, -sobre todo a la niñez- a observar a las ardillas de lejos y evitar alimentarlas, porque aunque parezcan inofensivas se caracterizan por tener un par de dientes frontales bastante fuertes, que pueden causar heridas de consideración.
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