“Nosotros debemos trabajar 12 horas continuas, descansamos una vez a la semana y nos pagan de 900 a mil 200 por semana, es algo bajo el sueldo, pero ya a nuestra edad nadie nos da una oportunidad”, refiere un guardia de seguridad que decidió omitir su nombre para evitar conflictos o represalias laborales.
Explicó que las condiciones laborales son “pesadas” para los trabajadores, ya que deben estar en diferentes casetas de la ciudad para prestar el servicio de plumas y vigilancia, en un horario que va de las 7 de la mañana a las 7 de la noche, y con un solo día de descanso por un sueldo que se destina la mayoría en transporte y comida.
Dice conocer que algunos no se encuentran dados de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero no pueden exigirlo porque su contratación fue de una forma algo informal, y sólo les llega un sobre con su salario y no saben qué podría pasar si un día requieren del servicio para alguna urgencia o atención médica.
“Conocemos que algunos compañeros fueron despedidos, y les dijeron que les iban a dar mil 200 pesos como finiquito, pero hasta el momento sólo les dieron 800 pesos y al parecer será lo único que recibirán por esos casi 12 meses que estuvieron colaborando para esta empresa”, explicó uno de los entrevistados.
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social pidió a los trabajadores que se encuentren fuera del régimen de afiliados del Seguro Social, como aquéllos que no tengan prestaciones a interponer una denuncia formal, a fin de velar por las necesidades de los trabajadores y los ingresos para su familia.
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