En una acción sorpresiva, agentes de la Policía Federal intentaron llevarse a la Ciudad de México a tres detenidos relacionados con el caso del exgobernador César Duarte.
Ayer desde la tarde aterrizó en el aeropuerto de Chihuahua un Lear Jet de la Policía Federal con oficiales federales, quienes traían el plan de vuelo de regreso a las 9 de la noche de Chihuahua a México “con detenidos”.
Todo indica que su pretensión era trasladar a Alejandro Gutiérrez “la Coneja”, Gerardo Villegas y Antonio Tarín, quienes tenían una audiencia en los juzgados federales. Al darse cuenta las instancias del Gobierno Estatal, se rodeó el recinto de los juzgados federales por elementos ministeriales y del Estado para evitar que se llevaran los federales a los detenidos.
Al ver que no lograron su plan de llevarse a los acusados de peculado y desvío de recursos a la Ciudad de México, se vieron obligados a regresarlos al Cereso del estado de Chihuahua, escoltados por policías estatales.
Fue este jueves cuando decenas de agentes estatales, municipales, ministeriales y de Vialidad sitiaron el edificio de los juzgados federales de la avenida Mirador, debido a que elementos federales pretendieron asegurar para su traslado a México a Gutiérrez, exsecretario general del PRI Nacional y a los exfuncionarios duartistas Tarín García y Villegas Madriles.
Los detenidos, quienes enfrentan cargos de peculado agravado por 250 millones de pesos, como cómplices del exgobernador prófugo César Duarte, fueron trasladados del Cereso a un juzgado federal para audiencia a distancia con un juez en la Ciudad de México, tras la cual agentes federales trataron de cumplir un ordenamiento judicial que indica deben estar recluidos en el Reclusorio Norte de la capital del país.
La audiencia de prolongó hasta la noche y ante la petición de los agentes federales de llevarse a los detenidos, los elementos estatales solicitaron refuerzos, por lo que comandantes de la Comisión Estatal de Seguridad, de la Policía Ministerial y Policía Municipal ordenaron a decenas de unidades cercar el edificio del Poder Judicial de la Federación de la Washington y Mirador, lo que generó tensiones por espacio de una hora, por el intento de dejar a los imputados fuera de la jurisdicción estatal.
Al lugar arribaron decenas de agentes armados, también de la División de Vialidad y unidades de las demás corporaciones que patrullaban todos los sectores de la capital, por lo que superados en número, los elementos federales desistieron del traslado.
Hubo un momento en que los ánimos se tensaron aún más. Fue cuando unas cinco unidades de la PF ingresaron hasta el interior de los juzgados federales y minutos después una unidad ministerial se atravesó en el acceso principal para evitar la entrada de más, mientras que guardias de seguridad de los juzgados se plantaron en este mismo acceso para tratar de evitar cualquier ingreso no autorizado.
Cada vehículo que iba saliendo era revisado por elementos estatales, quienes hacían algunas preguntas a los tripulantes e iluminaban el interior del vehículo para verificar quién iba al interior, algo que molestó a los guardias de seguridad, quienes señalaron que si deseaban revisar, debían hacerlo unos metros más adelante y no en propiedad de los juzgados; pero los elementos les pidieron que no intervinieran en su labor, de lo contrario podían ser arrestados.
Cabe señalar que la esposa de Antonio Tarín se encontraba a las afueras de los juzgados federales, quien se acercó desconcertada a preguntar sobre su marido.
Para las 22:13 horas salieron los imputados custodiados por los elementos federales y detrás de ellos el fuerte operativo, desplegado con unidades de ministeriales, estatales y agentes viales con rumbo al Cereso.
El fuerte dispositivo nutrido por más de 50 unidades tomó toda la avenida Mirador, luego la avenida Ocampo, posteriormente el Teófilo Borunda y Lombardo Toledano hasta el penal.
Y en punto de las 22:36 horas de este viernes arribaron al Cereso de Aquiles Serdán, donde de nueva cuenta fueron internados “la Coneja”, exsenador y exsecretario general del PRI Nacional; Gerardo Villegas, exdirector general de Administración del Gobierno de César Duarte, exgobernador sobre el que pesan 15 órdenes de aprehensión, y Tarín, exdirector de Adquisiciones de la administración de Duarte, mientras a las afueras se quedaron las decenas de elementos de las distintas corporaciones que “cuidaron” a los custodios al exterior de los juzgados federales con un buen tiempo y amenazaban con resguardar el Cereso durante toda la noche.
