La Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Chihuahua llevó a cabo su altar de muertos, con perspectiva de género, dedicado a Marisela Escobedo y al colectivo de “Ni una Menos”, así como a varias víctimas de feminicidio de este año y que ya no están, las encargadas de realizarlo fueron estudiantes que serán futuras abogadas.
Dulce Luévano, una de las organizadoras de esta ofrenda informó: “Lo hicimos para crear conciencia, ya que Chihuahua cuenta con una alta tasa de feminicidio y que aquí pasó todo lo de Marisela Escobedo, entonces nos corresponde alzar la voz como mujeres en este tema, y más que nosotras nos vamos a encargar en un futuro de la justicia aquí en nuestra entidad, por eso decidimos hacerlo sobre este asunto”.
Las personas que aportaron y participaron fueron: Celeste Herrera, Fernanda Noble, Frida Fernández, Miranda Acuña, Ángela Piñón, entre otras más, quienes respetaron las tradiciones colocando lo que lleva el altar de muertos, elementos fundamentales como ofrenda alimentos, velas, flores y objetos de uso cotidiano del difunto.
Desde el 2003 la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), reconoce esta tradición mexicana como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Las ofrendas forman parte fundamental de la festividad del Día de Muertos, pues es una manera de hacer que los difuntos visiten a sus seres queridos para volver a gozar de los placeres mundanos, así es como una vez al año, las casas mexicanas y muy en especial las de los pueblos indígenas, abren la puerta para recibir a sus antepasados.
DATO:
Los altares son la construcción simbólica de una serie de ideologías prehispánicas, mesoamericanas y religiosas
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