A la fecha, definitivamente no es un buen momento para obtener un crédito hipotecario, ni para adquirir un automóvil debido a las altas tasas de interés mismas que se esperan que bajen en 2023 o principios de 2024, de acuerdo a expertos financieros.
Luis Arturo Gómez Esparza, director general del Colegio de Negocios, recordó que el pasado jueves la Junta de Gobierno de Banco de México incrementó la tasas de referencia a 8.5% lo que significa que básicamente los créditos para el público en general se van a encarecer en los próximos días, en las próximas semanas.
Gómez expuso que el crédito más seguro del mercado es el hipotecario, porque está notariado, además de tener una garantía que es un bien inmueble, entonces que si al banco le cuesta conseguir el dinero un 8.5%, al cliente le cobrará por lo menos un 10% en el crédito más barato.
“Estamos hablando de que hace seis meses se podían encontrar créditos hipotecarios con una tasas de hasta el 7.5% ya para el consumidor final, entonces actualmente se partirá aproximadamente de un 10, 10.5, 10.8%, lo que es elevado”, refirió el licenciado en Administración Financiera y maestro en Finanzas.
En este sentido, manifestó que la recomendación sería no créditos hipotecarios de momento; añadiendo que se espera que a finales de 2023 o principios de 2024, la situación con respecto a la inflación se empiece a controlar un poco y descienda al 6-7%, y con ello Banco de México baje nuevamente la tasa de referencia.
Con respecto a los créditos automotrices –apuntó-, pasa exactamente lo mismo: “Si anteriormente conseguíamos un crédito automotriz con una tasa de mercado en un 14, 15, 16% ahora la vamos a empezar a ver en un 17, 18, 19 por ciento”.
Aparte, resaltó que si al alto costo del dinero se le agrega la crisis de suministro que atraviesa la industria automotriz, donde se tienen periodos de espera de hasta ocho meses para un vehículo nuevo, definitivamente tampoco es momento de adquirir un vehículo.
“Es decir, por leyes de oferta y demanda, cuando la demanda de automóviles permanece constante y la oferta disminuye, porque las fábricas de autos no se dan abasto con los componentes, con la mano de obra, entonces hay pocas unidades que ofertar y el precio sube”.
De hecho, expuso que los vehículos se han incrementado en su costo final alrededor de un 20% con respecto al año anterior, “así que por una parte están muy caros los vehículos en este momento, está muy caro el financiamiento, y hay que esperar mucho por un vehículo nuevo, entonces la invitación sería esperar a que pase la crisis de suministro, la elevada inflación para pensar en adquirir un vehículo”.
En tanto que el economista y empresario Juan Humberto Ortiz coincidió en que, a la fecha, no es recomendable “meterse” en créditos, sino más bien reducirlos, tomando en cuenta que las tasas de interés son muy altas.
“Tanto en créditos hipotecarios, como para comprar un vehículo, tienen altas tasas, así que no es recomendable”, comentó.
El pronóstico que compartió es que para finales de 2023 bajen las tasas de interés, pues mientras no baje la inflación, no disminuirán las tasas de interés; sin embargo, la inflación ha venido subiendo en los últimos tres meses, así es que insistió en que no es recomendable solicitar créditos.