Pablo Gerardo G.M. presuntamente abusó sexualmente de A.I.L.S al menos en 15 ocasiones a lo largo de 1 año 8 meses, ciclo de violencia que inició aproximadamente en septiembre del 2020 en perjuicio de la menor y bajo la amenaza de matar a su mamá Marisol N. y a su hermanita, e incluso en una ocasión, realizó tocamientos sexuales a su hermana menor Z.L.S. que en ese momento tenía 10 años de edad.
Lo anterior, según el testimonio que la menor dio a la Fiscalía Especializada de la Mujer, cuando fue a denunciar acompañada de su mamá las violaciones y dio su testimonio, antes de ser sustraída por su agresor; su testimonio se leyó por la representación social en la audiencia de vnculación por el delito de violación agravada en contra de Gerardo G.M. alias “el Yayo”.
Se detalló que según testimonio de la menor, fue en septiembre del 2020 cuando el hombre, de entonces unos 32 años de edad, obligó por primera vez a la niña de 12 años de edad en ese momento a ir a unas tapias, donde le impuso la cópula vía anal y vaginal a punta de arma de fuego, con la amenaza de matar a su mamá y a su hermanita.
Las reiteradas violaciones continuaron a lo largo de 1 años 8 meses y la menor incluso fue violada también por el hermano de Gerardo G.M., Luis, quien tenía 22 años de edad; sin embargo, ella dijo que Gerardo lo había hecho antes y durante al menos unas 15 ocasiones e incluso le daba pastillas para que no se embarazara.
Sin embargo, la menor sí quedó embarazada y fue llevada a los servicios de salud por su madre, al darse cuenta de las violaciones y a la Fiscalía a denunciar los hechos, aunque no se proporcionó fecha exacta de esta denuncia; la interrupción del embarazo se le dio puesto que es menor de edad y víctima de violación. Ella tenía 11 semanas y media de gestación.
Según el relato de la representación social, los hermanos llegaron a vivir en el 2020 a una casa cercana a la casa de Alexa, en la colonia Genaro Vázquez, donde vivía con su mamá y su hermanita, pues la madre se encargaba sola de sus hijas, mientras que del padre de las menores no se dio ninguna información o referencia alguna.
La representación social refirió que, según los testimonios de la menor, Gerardo solía ir a la casa cuando sabía que la mamá no estaba ahí pues se encontraba trabajando; en una ocasión, se metió a su casa y le enseñó una pistola para violarla, amenazándola con matar a su mamá y a su hermana si ella decía algo.
En el testimonio de A.I.L.S. se refirió que tenía mucho miedo de Gerardo porque abusaba de ella muy seguido y que le dolía mucho; además, dijo que las tenían vigiladas con “sus achichincles” y que tenía mucho miedo de que le hiciera algo a su mamá y a su hermana, por lo que ella no decía nada sobre los abusos que sufría.
La representación social dijo que la cantidad de detalles que Alexa dio en su testimonio, así como las referencias temporales y los hechos narrados, son suficientes para corroborar que la menor no inventó nada de lo que dijo y por el contrario fueron hechos que ocurrieron, puesto que una médica legista corroboró con una inspección física que la menor tenía signos antiguos y nuevos de violación vaginal.
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