Con la finalidad de hacer un mejor trabajo y tratar con dignidad a otro ser humano por el simple hecho de ser humano se realizó el primer curso de alta formación en la aplicación del Protocolo de Estambul para el combate a la tortura, trataos crueles inhumanos e ilegales.
El Paraninfo Universitario fue la sede para la ceremonia de clausura del curso de Alta Formación en la Aplicación de Protocolo de Estambul y la conferencia magistral Caso Masacres de El Mozote y lugares aledaños contra El Salvador, emblemático debido a que las fuerzas armadas realizaron ejecuciones masivas, colectivas e indiscriminadas de civiles.
Chihuahua se convierte en la primera entidad en llevar a cabo un curso de especialización en prevención de la tortura en América Latina, durante una semana, personal de la Fiscalía General del Estado, abogados y estudiantes de la Licenciatura de Derecho participaron en la capacitación especializada.
El licenciado César Eduardo Gutiérrez Aguirre, director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Chihuahua destacó que la tortura no solo es física, sino emocional y psicológica con el fin de obtener una declaración de una persona e incluso su incriminación.
Dijo que es necesario contar con mecanismos para probar la tortura y tratos crueles, inhumanos o degradantes, que se conoce como Protocolo de Estambul, que si bien no es vinculante, si colabora con la Ley Internacional para obligar a los gobiernos a investigar y documentar los incidentes de tortura y castigar a los responsables.
“La tortura es algo vergonzoso, pero es peor aún si se convierte en política de un democracia, es una contradicción del Estado de Derecho, y es inaceptable en cualquier tiempo y lugar”, dijo el director universitario.
En su intervención Francisco Sáenz Soto, en representación del César Gustavo Jáuregui, Fiscal General del Estado, destacó el esfuerzo conjunto con el Centro Iberoamericano de Formación en Derecho Internacional y Derechos Humanos (CIFODIDH), así como el apoyo del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH) y de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) para concretar los trabajos de capacitación.
Dijo que desde el pasado mes de enero, expertos pertenecientes a los Sistemas de Protección Internacionales de Derechos Humanos y de dependencias públicas y organizaciones de la sociedad civil de Colombia, Perú, Costa Rica, El Salvador y México, impartieron módulos y materias a cerca de 100 elementos de la Fiscalía.
En el cierre de esta capacitación se contó con los especialistas en el Protocolo de Estambul, psicología forense y criminalística Jayme Magaña y Martín Mata, quienes explicaron que el protocolo es un documento que establece consideraciones generales de lo que debe tomarse en cuenta durante las evaluaciones médico-psicológicas para identificar las causas y consecuencias de lo que puede llegar a configurar el delito de tortura.
Ambos han dado seguimiento a las personas desplazadas de El Mozote, quienes permanecen en Uruguay tras las masacres colectivas. Además mencionaron que las consecuencias de la tortura ejercida por las fuerzas armadas en el caserío de El Mozote siguen presentes en los sobrevivientes.
En la ceremonia estuvieron presentes Aarón Flores Velasco del CIFODIDH, la Fiscal Especializada en Investigación a Violaciones de los Derechos Humanos, Ada Miriam Aguilera Mercado y en representación de la Secretaria General de la UACH, Antonio Aguirre López.
