El activista Daniel Valdez, quien todos los años recorre 500 millas desde Lovington, Nuevo México hasta esta ciudad de Delicias, llegó ayer ante la algarabía de muchas personas que lo recibieron con aprecio, ya que esta acción la realiza para apoyar al Hogar de Niños Cusmano y asilo de ancianos San Vicente de Paul.
“800 Kilómetros de esperanza” es como le denominan a esta acción que Daniel ha hecho por cuarto año consecutivo, y pasa por 19 ciudades entre el país vecino del norte y nuestro país dentro del estado de Chihuahua. Entrevistado al llegar por la avenida Río San Pedro en la zona norte de la ciudad, Daniel lo primero que mencionó es que “gracias a Dios ya había llegado” y que sin él no podría, “y por Él estoy aquí” expresó al compartir que salió desde el 21 de diciembre, recorriendo prácticamente las 500 millas. Daniel toma cada año la ruta desde su lugar de residencia en Lovington, Nuevo México, pasando de pueblo en pueblo, recorriendo unas 30 millas diarias, para hacer 16 días al final.
Comenta el activista que salió con su esposa, su hija y su suegro, quienes lo siguen en caravana e incluso va un camión de los llamados “motor home” atrás de él. El recorrido incluye buen y mal clima, comparte, de hecho le tocó algo de hielo y otros días de vientos, sin embargo refiere que de los cuatro años que ha hecho esta travesía, este año le ha tocado el mejor clima.
Daniel Valdez dijo no haber tenido complicación alguna gracias a Dios para llegar a Cristo Rey en Delicias y posteriormente al asilo y hogar de niños, tratando de motivar a las personas, de tocar los corazones para que haya más gente noble que ayude al prójimo, al necesitado. El motivo hace cuatro años, es simplemente el amor de Dios, “podría decirse que es un llamado de Dios, expresar unión y la paz del mundo, para lograr una libertad como seres humanos hijos de Dios”.
Entre los sitios por los que pasa en este trayecto del norte al sur, están por ejemplo Hobbs, Yall, en Nuevo México; luego ya en Texas, pueblos como Kermit, Coyanosa, Alpine, Marfa, hasta llegar a Presidio y cruzar a Ojinaga, pasando por la estación La Mula, Aldama, Chihuahua capital hasta pasar por Cárdenas, Meoqui y llegar a Delicias, compartió el activista religioso quien se dedica al mantenimiento de vehículos y lavado, en los Estados Unidos, mientras que es originario de Chamizal, Satevó, pero hijo adoptivo de Delicias y hoy en día residente en Lovington, Nuevo México.
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