DELICIAS.- Este viernes la defensa de José Bryan S. Z, alias “el 90”, interrogó a su primer testigo, quien contradijo las declaraciones hechas por T .J., familiar de la víctima del secuestro ocurrido el 19 de mayo de 2020 en el municipio de Valle de Zaragoza.
Durante la audiencia número 20 del juicio oral 16/2023, la parte de la defensa buscó refutar el testimonio de T.J, para lo cual llamaron a comparecer a la exesposa de éste, la señora Mayra Q.G, ex esposa de T.J, a quien interrogaron por espacio de tres horas en presencia de los jueces Omar Meléndez Renova, Diana Peña Mauricio y Manuel Arturo Quintana.
La mujer, de quien se aclaró no tiene vínculos de ningún tipo con Bryan S. Z, refirió en su testimonio que una noche a mediados de mayo de 2020, llegaron al domicilio que compartía con su exesposo tres sujetos a bordo de una camioneta gris, quienes intercambiaron palabras altisonantes con su cónyuge.
A pregunta expresa del abogado de la defensa, la testigo negó que los tres individuos portaran armas a la vista y aseguró que tampoco su pareja tenía armas en casa.
Narró también que su entonces marido no quiso dar explicaciones del por qué ocurrió el altercado (acontecido antes del secuestro de su familiar) y en cambio decidió marcharse del hogar a las 8:30 horas del día siguiente, cuando un hermano y el hijo de éste llegaron al domicilio para recogerlo.
Señaló que el incidente ocurrido aquella noche fue la causa del divorcio, ya que a los días T. J le envió la demanda correspondiente, mencionando que habían estado casados por bienes separados, por lo que no hizo ninguna reclamación.
La versión presentada por Mayra Q. G contradice el testimonio de T. J, quien anteriormente declaró al Ministerio Público que los hechos ocurrieron de otra forma, refiriendo que habían llegado varias camionetas con una veintena de sujetos armados que abrieron fuego contra su vivienda, a los que él habría repelido abriendo fuego con un arma de su propiedad.
Además, la mujer declaró que la noche del altercado llamó a la policía municipal, pero al llegar el agente de turno al domicilio, ella y su esposo se negaron a abrirle la puerta. También, mencionó que ningún elemento de la Policía Ministerial acudió al sitio.
Mayra Q. G relató asimismo que tras el incidente, se fue a vivir durante ocho meses a la casa de su hijo. Posteriormente, regresó a la vivienda que antes compartía con su exesposo, encontrando que la puerta estaba abierta y que faltaban varias cosas, pero decidió no denunciar a la policía municipal.
El interrogatorio finalizó poco antes de las 15:20 horas, fijándose el miércoles 15 de noviembre como fecha para la siguiente audiencia del juicio.
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