Han pasado casi 10 meses y nada se sabe del paradero de Alondra Nolasco

Han pasado casi 10 meses y nada se sabe del paradero de la niña Alondra Nolasco, quien fue sustraída de su domicilio en la colonia Vistas del Norte el 18 de septiembre de 2017, mientras su madre se encontraba trabajando.

Esos zapatos morados que Alondra usaría cuando cumpliera 10 años han permanecido al lado de su fotografía durante todo este tiempo que ha representado un calvario para su madre, la señora Jéssica Corpus, quien tiene la esperanza de encontrar con vida a su pequeña que está en calidad de desaparecida.

La madre de familia informó que el contacto con la autoridad ha existido desde la desaparición de su hija y que a la fecha han sostenido varias reuniones donde les han mostrado los avances en el caso. “Sabemos que están investigando, pero aún no se localiza a la niña, entonces para nosotros se vuelve un proceso lento porque todavía no se ha sabido nada”.

Estos más de nueve meses de búsqueda han sido horribles para Jéssica, sobre todo al recordar que su hija ya perdió todo el ciclo escolar y que estaría pasando al último grado de primaria para posteriormente ingresar a secundaria, pues el estudio estaba entre las prioridades de Alondra, así como el deporte.

“Ha sido muy difícil que no esté con nosotros. Es terrible no saber nada de ella”, dijo y agregó que ya es un hecho que Ramiro Córdova, el abuelastro de la niña, tuvo que ver con la desaparición de la menor “por todas las pruebas que se han encontrado, principalmente el ADN”.

Confesó que en un principio se negaba a pensar que esta persona fuera el culpable, dado que lo consideraban de confianza, “pero ahorita ya no queda duda que él fue quien se la llevó y por eso está escondido”, declaró.

En relación a la búsqueda de Ramiro Córdova, Jéssica Corpus también considera que se ha tornado lenta. Al igual que usuarios de Facebook que escriben sobre las pesquisas publicadas y compartidas, opina que no puede ser posible que todavía no lo hayan encontrado. “Es una persona que sale a la calle y nadie lo ve, nadie lo encuentra. Los familiares saben dónde está, pero no quieren decir, cuando deberían denunciarlo porque lo que hizo no es como robarse unas papitas de la tienda, es algo sumamente delicado”, dijo.

La familia de Jéssica y ella piensan que Córdova permanece en el estado de Chihuahua, pero rumbo a la Sierra Tarahumara porque es originario de un pueblito de esta zona, aunque no sabe exactamente de dónde.

Todo este proceso de búsqueda también ha sido bastante pesado para los hermanos de Alondra: Camila Jazmín Corpus Moreno, de 11 años y Luis Israel Nolasco Corpus, de 13 años de edad, quienes este miércoles se acaban de graduar de sexto, mientras que Alondra estaría terminando el quinto año de primaria.

A los tres les encanta el futbol, de hecho jugaban en el mismo equipo antes de que desapareciera. El gusto por este deporte les surgió por un tío que lo practicaba y cuando descubrieron el sentimiento de patear un balón que Jéssica compró para su hijo varón, pero que al final de cuentas lo venían utilizando los tres.

Camila y Luis dejaron el equipo entre enero y febrero de este año y apenas hace dos semanas se reincorporaron al equipo donde extrañan bastante a Alondra.

Jéssica, su familia, amigos y conocidos han hecho de todo por tratar de encontrar a Alondra, de hecho crearon una página en Facebook donde recurrentemente publican pesquisas tanto de la chiquilla como del principal sospechoso de su desaparición.

No faltan los comentarios de personas que aseguran que ya la encontraron viva o muerta, cuando no es así, “lo que desincentiva a que la gente siga compartiendo la publicación”. “Hace poco una mujer dijo que se la habían echado a los marranos, es gente que está mal informada y lo hace para que ya no se siga difundiendo la imagen y eso no debería porque hay quienes están apoyando y al ver estos comentarios dejarán de prestarle atención”, comentó la afligida madre.

“Se publican constantemente las fotografías para enterar a la ciudadanía que Alondra sigue desaparecida y que cualquier dato en relación a mi hija o este señor lo estaremos dando a conocer la abogada o yo; no se debe creer en personas ajenas”, fue el mensaje hacia la población que emitió Jéssica, quien aprovechó para pedir que se sigan compartiendo las imágenes.

Ya eran casi nueve años de que Jéssica y sus hijos conocían a Ramiro Córdova y nunca notaron alguna actitud sospechosa; de hecho los hermanitos lo querían mucho y jamás le hicieron un comentario negativo a su madre en relación a esta persona. Siempre que llegaba a su casa en la colonia Vistas de Norte lo saludaban con mucho gusto, por lo que esta familia nunca imaginó que les podría hacer tanto daño.

La entrevistada confesó que tiene tiempo de no frecuentar a su madre, aunque el distanciamiento se presentó desde antes de este suceso. Podría decirse que había mayor cercanía de la familia Corpus con el abuelastro que con la abuela; este primero era cobrador y recorría la colonia Vistas del Norte y Riberas de Sacramento por lo que una o dos veces por semana pasaba a saludarlos a su casa, ganándose enteramente su confianza.

Jéssica Corpus manifestó que deberían unirse más autoridades a este caso para que se extienda la búsqueda. “Yo sé que están haciendo lo que pueden, pero sería bueno buscarlo en pueblos alejados donde podría estar escondido. También podría haber cambiado su aspecto para que no lo reconozcan, entonces hay que prestar atención en todo esto”, señaló.

Quien tenga cualquier información que pueda dar con el paradero tanto de Alondra Nolasco como de Ramiro Córdova puede comunicarse al 911.

LA FIESTA QUE NO PUDO REALIZARSE

Este 23 de septiembre, Alondra cumple 11 años de edad. El año pasado, la familia tenía planeada una fiesta para celebrar a Alondra y su hermana Camila juntas, era la primera que tuvieran con invitados, pues la situación económica no lo había permitido.

Camila cumple años el 28 de septiembre, sólo unos días después de su hermana, que desapareció el 18 de ese mismo mes, por lo que todo se quedó en preparativos.

Su mamá ya les había comprado sus blusas de los personajes animados de Ana y Elsa y unos zapatos nuevos, los de Alondra son morados, su color favorito, pero siguen nuevos porque la arrancaron de su familia unos días antes de llevarse a cabo el festejo.

Los zapatos están cerca de su foto como símbolo de esperanza, de que la siguen esperando para que los estrene, al igual que su ropa.

“Les dije que sería una fiesta para las dos porque no había dinero para festejarlas por separado y que cuando cumplieran 15 años sería la segunda, y la sigo esperando para cumplírselo”, abundó.