Por no hacer la lectura de los derechos, perder los casquillos de la escena del crimen, la falta de pericial comparativa con el arma oficial, por detenerlo en su domicilio entre otras variables más, fue el verdadero motivo por el cual dejaron en libertad al agente estatal Ramón Favela, quien fue el presunto responsable de privar de la vida al joven Héctor Armando Anguiano Espinoza.
Según la carpeta de investigación que mantiene la Fiscalía General de Estado donde se habla de la detención del agente estatal Ramón Favela, se destaca las carencias que hubo en la madrugada del pasado 20 de julio, donde hubo una serie de irregularidades que el Juez de Control, Luis Carlos Flores, determinó que su detención no fue apegada a derecho, por lo que podría llevar a cabo su juicio en libertad.
Información de la propia dependencia, explica que dentro de los hechos se trató de llevar a cabo una autoincriminación a un delito, lo cual está prohibido en el sistema penal en Chihuahua, al declarar que él fue quien disparo en la riña, donde participó su hijo y otros jóvenes que viajaban en vehículos todo terreno.
También se sabe que la prueba de rodizonato dio negativo de las manos del elemento de seguridad, por cuestiones que han no han podido ser resueltas, ya que es una prueba con la que se descubre si una persona accionó o no un arma de fuego a través de diferentes sustancias químicas y análisis a los imputados.
Otro de los puntos que orilló a que el Juez de Control, diera la liberta a Ramón Favela, fue que los agentes de la Comisión Estatal de Seguridad, pidieron o desaparecieron los casquillos de la escena del crimen, y por tal motivo no se logró hacer la pericial comparativa con el arma oficial que tenía el agente estatal.
Entre las observaciones que se mantienen del caso y que serán atendidas por los agentes de Asuntos Internos, fue que los agentes de la Comisión Estatal (corporación a la que pertenece el imputado), no aseguraron a Rafael Favela en el lugar de los hechos, donde se encontraba el cuerpo sin vida del joven Anguiano Espinoza.
De forma extraoficial, se dio a conocer que los agentes que arribaron al lugar de los hechos, detuvieron al elemento señalado, en su domicilio, que se encuentra a algunos metros de lo ocurrido, que es otra de las irregularidades por las que el juez decidió que el caso no estaba bien fundamentado y que se debía a una detención ilegal.
No hubo elementos facticos para sostener la detención legal, por parte de los agentes investigadores, ya que la detención del presunto responsable, había sido con varios minutos de diferencia y en otro punto que no era la escena del crimen como se había manejado en un principio.
De igual forma y como se dio a conocer el día de la audiencia, el agente estatal, al momento de ser detenido por sus propios compañeros, no le hicieron la lectura oficial de sus derechos, no le dijeron que podría guardar silencio y todo lo indispensable que se requiere para realizar una legal detención en el estado de Chihuahua.
Dentro de la información que concentra la propia Fiscalía General del estado, fue que el agente de la CES, sostuvo una riña con los jóvenes que viajaban en vehículos todo terreno, luego de que tuvieran un altercado con su hijo, donde posteriormente fue a “cazarlos” y solo logró privar de la vida a uno de ellos.
A pesar que los compañeros de Héctor Anguiano Espinoza declararon sobre lo que había ocurrido ese día por la madrugada, los agentes no realizaron bien su labor y presentaron un expediente sin suficientes sustente, que el juez de control, determinó que no había una detención legal en contra del presunto culpable.
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